Luego de que gobernadores como el priista Humberto Moreira, de Coahuila, han externado su rechazo a la reforma electoral y han adelantado que sus respectivos congresos no la aprobarán, coordinadores parlamentarios en la Cámara de Diputados criticaron que los mandatarios estatales "den línea" a sus legisladores.
Héctor Larios, coordinador del Partido Acción Nacional (PAN), criticó la actitud de los gobernadores.
"Se exhiben los gobernadores que dicen que van a hacer que su congreso no apruebe la refomas, que dejen en libertad a sus congresos, que no se exhiban haciendo saber a la ciudadanía que ellos mandan a los congresos", pidió.
Entrevistado antes de su ingreso a la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Larios dijo que cada congreso local debe evaluar el alcance de la reforma electoral, y con esa información emitir su voto.
Emilio Gamboa Patrón, coordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara baja, hizo un llamado a los gobernadores a respetar el voto de sus legisladores.
"Yo no conozco un gobernador que vote en el Congreso local ¿eh? Yo le pediría a todos los gobernadores que tengan absoluto respeto a sus congresos locales", dijo Gamboa y sentenció que estarán atentos a lo que digan los mandatarios estatales.
El gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, consideró que la reforma electoral aprobada violaría el federalismo, la soberanía de los estados y la propia Constitución en cuanto a la libertad de expresión.
No lo debemos aceptar, advirtió el gobernador Humberto Moreira, al adelantar que Coahuila rechazará la reforma.
"Los estados no somos menores de edad, ni estamos pintados, y no nos tomaron en cuenta, a mí nadie me habló para preguntarme si estaba de acuerdo", afirmó.
Al ser una reforma Constitucional, la reforma electoral necesita el aval de la mitad más uno de los congresos locales de los estados de la República.
Al respecto, Juan N. Guerra, vicecoordinador de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), también fustigó la actitud de gobernadores como Moreira.
"Nosotros confiamos que todos los gobernadores entiendan que hemos dado un paso saludable para la política mexicana, ahora sería malo que los gobernadores ya estén dando línea a sus congresos".