EL SIGLO DE TORREÓN
El gobernador de Coahuila, Humberto Moreira Valdés, aseguró que no ha sido víctima de amenazas de parte de quienes resultan afectados con los operativos de seguridad que se implementan en las distintas regiones el estado a fin de contrarrestar a la delincuencia.
Dijo que una de las principales responsabilidades de los gobernantes es “garantizar la seguridad de los ciudadanos, sin importar que estén de por medio amenazas o el riesgo de los servidores públicos”.
Se refirió a las declaraciones del presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, quien reconoció de manera pública que tanto él como su familia han sido amenazados por integrantes del crimen organizado.
“Nuestro caso no es el mismo”, aseguró el gobernador.
Moreira Valdés indicó que lejos de pensar en reducir las operaciones de “blindaje” de Coahuila, dijo que su instrucción hacia la Secretaría de Seguridad Pública a cargo de Fausto Destenave Kuri y de la Procuraduría General de Justicia en el Estado que encabeza Jesús Torres Charles, “es que este tipo de acciones continúen”.
Recordó que con el respaldo del Ejército Mexicano, las policías Estatal y Ministerial realizan operativos de seguridad en las regiones Laguna, Sureste, Centro y Norte del estado.
Las operaciones básicamente consisten en retenes y centros de revisión carretera en las vías de acceso al estado y en aquellas que comunican a Coahuila con estados como Nuevo León y Durango, donde la violencia por el crimen organizado ha sido evidente.