TORREÓN, COAH.- Con gran saña y crueldad un sujeto en estado de ebriedad y al parecer bajo los influjos de algún enervante, asesinó a martillazos a su concubina de apenas 18 años de edad.
Arrepentido del crimen que acababa de cometer, el presunto asesino se comunicó vía telefónica poco antes de las ocho de la noche al puesto de socorro de la Cruz Roja para que le brindaran los primeros auxilios a su víctima, a la que estuvo golpeando y torturando con un martillo desde las dos de la tarde.
Los trágicos acontecimientos se desarrollaron en el interior de la finca ubicada en callejón Noveno número 61 de la colonia Torreón y Anexas, lugar donde se encontró el cuerpo de quien en vida respondiera al nombre de Lizeth Yahaira Hernández Hernández, de 18 años de edad, el cual presentaba múltiples golpes producidos por objeto contundente principalmente en la cabeza.
El presunto asesino quien estuvo a punto de ser linchado por los familiares de su víctima, fue identificado como Jeovani Barajas Lucio, de 34 años de edad, quien dijo tener su domicilio en la colonia Hacienda Real, en Tlaquepaque, Jalisco, y dos meses de residencia en la colonia Torreón y Anexas.
De acuerdo con el reporte de los elementos de la unidad 35607 de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), siendo aproximadamente las 19:50 horas, recibieron la orden vía radio de trasladarse a la avenida Gustavo A. Madero y callejón Noveno de la colonia Torreón y Anexas, lugar donde se reportaba una persona lesionada.
Al mismo tiempo hicieron su arribo los preventivos y los paramédicos de Cruz Roja, los cuales fueron recibidos por el presunto asesino, quien con signos de desesperación por lo que había hecho, les indicó el lugar donde se encontraba el cuerpo.
Tras su detención, el sujeto señaló que hace aproximadamente dos meses comenzó a vivir en unión libre con Lizeth Yahaira, y que desde la misma fecha comenzaron a tener problemas conyugales.
Agregó que ayer al medio día comenzó a ingerir bebidas embriagantes, lo que provocó un enfrentamiento verbal con su concubina, por lo que en un momento dado tomó un martillo con el que la golpeó en repetidas ocasiones y por varias horas, hasta provocarle la muerte.
Las autoridades ministeriales que tomaron conocimiento de los hechos, indicaron que por la rigidez que presentaba el cuerpo de la joven, su muerte pudo haberse registrado entre las dos y tres de la tarde, sin embargo, fue hasta cerca de las ocho de la noche que el presunto asesino dio aviso.