Momento en que el cadáver de la víctima es sacado del domicilio; los policías tuvieron que cerrar algunas calles por el número de vecinos que se aglomeraron al conocer la noticia.
Propinan golpiza a comerciante para asaltarlo y le provocan un paro cardiaco y coma diabético
TORREÓN, COAH.- Dos sujetos de aspecto ‘cholo’ asaltaron a un comerciante en su propio domicilio de la colonia San Joaquín, quien murió a causa de la golpiza que le propinaron, lo cual le provocó un coma diabético y paro cardiaco, en hechos ocurridos el mediodía de ayer.
La víctima de los maleantes tenía por nombre, Héctor Manuel Jiménez Segura, de 68 años, con domicilio en avenida San Carlos número 822 de la citada colonia, donde residía desde hace unos 30 años.
El occiso vendía pantalones en su casa y tenía una trabajadora, identificada como ‘Chiquis’, quien fue testigo presencial en parte de los hechos.
Con las investigaciones de la Agencia Investigadora del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal, se pudo establecer que al filo de las 13:30 horas, irrumpieron a la casa de la víctima, dos sujetos jóvenes de aspecto ‘cholo’.
Los maleantes se dirigieron de inmediato con Héctor Manuel, a quien con insultos y empujones llevaron a un baño de la parte trasera de la casa y lo mismo hicieron con la muchacha, aunque a ella la encerraron en otro baño, donde le ataron las manos.
Héctor Manuel sufrió varios golpes en el rostro y al verlo desmayado, los ladrones buscaron el dinero y se lo llevaron, al igual que otros objetos que encontraron y luego huyeron.
Como pudo, la mujer se desató y acudió en busca de su patrón, a quien encontró quejándose en forma lastimosa y la empleada pidió ayuda, llegando más tarde los paramédicos de la Cruz Roja y elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Los paramédicos revisaron los signos vitales del comerciante y se percataron que ya estaba muerto, por lo que dieron aviso a la Subprocuraduría de Justicia del Estado.
En pocos minutos había afuera de la casa decenas de curiosos y vecinos que comentaban lo sucedido y algunos afirmaban que “habían asaltado al señor que vendía pantalones y lo estrangularon”. Hubo necesidad de cerrar la avenida en virtud de la gran cantidad de patrullas y personas que se arremolinaron en el lugar de los hechos.
El cuerpo sin vida del comerciante fue enviado al anfiteatro del Hospital Universitario para la necropsia de Ley por parte del médico legista y entregarlo a sus familiares.
