Al menos nueve personas murieron ayer y 17 resultaron heridas en varios sucesos en distintas zonas de Irak, el mismo día en que la Policía iraquí halló diez cadáveres en Bagdad y en Mosul (norte del país), según fuentes policiales iraquíes.
El suceso más sangriento se produjo en el barrio de Al Yarediya, en el sur de la capital, donde cuatro personas murieron y quince resultaron heridas por la explosión de un coche bomba, informaron fuentes policiales iraquíes.
El estallido del vehículo, que estaba estacionado en una avenida, causó además daños materiales importantes en otros coches aparcados en la zona, en locales comerciales y en edificios colindantes.
También en el sur de Bagdad, pero en el área de Yisr Diyala, un civil perdió la vida y otros dos resultaron heridos de gravedad por el estallido de una bomba al paso de una patrulla de una Fuerza de élite del Ministerio de Interior de Irak, señalaron fuentes policiales.
Asimismo, las fuentes indicaron que un grupo armado mató ayer a un oficial de Policía, identificado como Saleh Mahdi, frente a su vivienda en el barrio de Al Adel, en el oeste de la capital iraquí.
Por otro lado, tres personas murieron ayer en distintos ataques en la provincia de Nínive, en el norte de Irak, señalaron fuentes policiales iraquíes.
Mientras que un agente de Policía perdió la vida por el estallido de un artefacto explosivo al paso de una patrulla en el barrio 17 de Julio, en el oeste de Mosul, capital de Nínive, un grupo armado irrumpió en una carnicería de la misma zona y acribilló a su propietario.
En otro suceso, un abogado, identificado como Abdulqahar Suleiman, fue asesinado en una emboscada tendida por desconocidos cuando se desplazaba en coche, también en el oeste de Mosul, agregaron las fuentes.
Por otra parte, en la misma ciudad, la Policía halló dos cadáveres con señales de tortura y con heridas de bala en diversas partes del cuerpo.