En el medio rural algunos de los problemas que encuentran los funcionarios electorales para escoger funcionarios de casilla son el analfabetismo, la edad mayor de la gente y el ausentismo por migración.
El Siglo de Durango
La organización y el desarrollo del pasado proceso electoral local evidenció el abandono en el que se encuentran la mayoría de las comunidades del medio rural en el municipio de Durango.
Lo anterior lo reveló Héctor Agapito Robles Sánchez, presidente del Consejo Municipal Electoral de la capital duranguense, quien dijo que “son incontables las localidades fantasmas, es decir, los pueblos que están sin gente en el campo de este municipio”.
Reveló que en las regiones dedicadas a la agricultura la falta de empleo ha orillado a la gente a radicar en la mancha urbana o a emigrar al extranjero, mientras que en las regiones serranas el fenómeno es similar por falta de actividad en el sector forestal.
“Hay comunidades como El Durazno, El Pueblito, González Ortega, Pastores y Anexos, Otinapa, Regocijo... son incontables las comunidades que han ido muriendo porque la gente se va”, declaró Robles Sánchez.
Aunque estimó que es cambiante el flujo migratorio pues en temporadas la gente se va y en otras regresa a su tierra natal, el funcionario electoral admitió que ni los padrones y registros electorales pueden ser un referente real de la población del medio rural.
Con tres procesos electorales locales al frente del Consejo Municipal Electoral de Durango (2001, 2004 y 2007), Héctor Agapito expresó que al preparar cada elección el personal de este organismo se topa con este problema del abandono de los pueblos.
El funcionario electoral manifestó que en gran medida el abandono de los pueblos y las comunidades rurales del municipio de Durango se debe a la ausencia de empleo y de oportunidades de sustento económico.
Finalmente, mencionó que en el medio rural algunos de los problemas que encuentran los funcionarios electorales para preparar una elección y escoger funcionarios de casilla son el analfabetismo, la edad mayor de la gente y el ausentismo por migración.
Aceptación
Óscar García Barrón, líder de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos de Durango (CNC), reconoció en días pasados que el abandono en los pueblos trae consigo miseria y pobreza en las comunidades del medio rural.
Dijo que el campo duranguense vive una severa crisis que se traduce en un alto flujo migratorio hacia los principales centros urbanos, y en especial hacia los Estados Unidos de Norteamérica.
Sin embargo, lamentó que desafortunadamente la situación de los campesinos no mejora mucho cuando emigran a los centros urbanos o al extranjero, pues lo único que hacen es nutrir los cinturones de miseria de las ciudades.
Y dejó claro que la migración rural se nutre por factores como la falta de empleo y de oportunidades de desarrollo, y la ausencia de programas de comercialización realmente rentables y redituables para los productores.
