LAS HERIDAS, QUEMADURAS Y FRACTURAS EN LA CABRA
Estos daños físicos en el ganado caprino son comunes, pues en ciertas ocasiones las cabras resultan lastimadas por la agresividad de los perros, con algunos depredadores o con otras cabras. Normalmente con un poco de auxilio el animal sanará. Primero se deberán detener las hemorragias, esto se puede hacer relativamente con facilidad aplicando algo de presión; en seguida, limpie la herida con jabón y con agua, quite todo el polvo, pelo y basuras.
Trate las heridas de una manera suave de modo que no provoque un nuevo sangrado, luego aplique un ungüento, crema o polvo con antibiótico en la misma área, finalmente si el área dañada es grande aplique un vendaje.
Cuando es una quemada la afección, limpie y proteja esa área, con un ungüento, use de preferencia suero fisiológico (solución isotónica de cloruro de sodio) para limpiar y no dañe el área quemada.
Las fracturas y dislocaciones la mayoría de las veces se presentan cuando las cabras se pelean o se quedan atoradas en las cercas, en los comederos, bebederos, o en otro tipo de equipo. Las dislocaciones de las articulaciones se aprecian por los ángulos anormales de los huesos largos que salen de una articulación. Habitualmente las extremidades se encuentran fijas o se tiene dificultad para moverlas. Algunas veces la parte que se encuentra más distante del cuerpo puede ser jalada y se regresará a su lugar con un ligero tronido. Si esto no puede hacerse, probablemente se deberá desechar o sacrificar al animal. Las fracturas normalmente son de los huesos largos. El caprinocultor podrá diagnosticar esta situación por los ángulos anormales, movimientos flojos, un sonido característico o de raspado en el lugar de la fractura o en ocasiones por la salida del hueso a través del tejido blando o penetrando hasta la piel. Si las partes rotas del hueso están más o menos juntas, si no hay penetración de la piel, la fractura puede ser inmovilizada y es probable que la cabra sane en unas seis a ocho semanas. Sin embargo hay que evaluar el valor de la cabra, si conviene tratarla o es más redituable para el establo la venta como animal de desecho.
En la actualidad existen muy buenos productos tópicos (cicatrizantes) para tratar las heridas de las cabras, uno de los mejores es el “aluspray”, también se puede usar el “matacresa” y el “topazone”, dependiendo de la gravedad y del que han usado y les ha resultado más efectivo. Anteriormente sólo se disponía del “azul”.
En otro aspecto, es importante la unión de todos los caprinocultores, con la finalidad de hacer un frente común y no estar a expensas de los acopiadores de la leche de cabra (ruteros, acopiadores y las propias empresas) ya que bajan el precio del producto cuando quieren o empiezan con sus castigos con el gastado lema de que está baja en grasa. En lugar de apoyarlos como proveedores de la materia prima que la empresa requiere. Esta simbiosis productiva debe tratar de bajar recursos que están disponibles en la alianza para el campo, en su apartado Desarrollo Rural (capacitación y asistencia técnica), ya sea DEPAI, GGAVATT, o otra modalidad, con la finalidad de que al caprinocultor le salga más barato la asesoría y la empresa obtenga leche de calidad.