LOS ENGAÑOS E INOCENTADAS EN LA ACTIVIDAD CAPRINA
Hace cuatro años comentábamos en este mismo espacio de las tranzas a las que está expuesta esta actividad de la caprinocultura, que al igual que todas las que generan ingresos económicos para el productor, está predispuesta al engaño, principalmente por la derrama económica que representa. Para lo cual los “coyotes de dos patas” están que se pelan por “colaborar” en la comercialización de los diferentes productos de esta especie. Este es uno de los males más nocivos de la caprinocultura en la Región Lagunera, incluso que la brucelosis, el otro mal, los seudo líderes, que en su momento se les ha hecho notar sus errores y aciertos, pero en esta ocasión es necesario señalar y en cierta forma alertar a los caprinocultores de esta área geográfica, de una persona que en estas fechas ya volvió como se anuncia, la curandera “Maru”, y continúa con las mismas prácticas para engañar a los productores de esta noble actividad, por lo cual se les notifica que tengan bastante cuidado al tratar con dicha persona. Sr. González, las características de dicha persona, la cual desde hace 13 años se auto nombraba y se daba a conocer con ese apellido, argumenta que viene de la ciudad de Saltillo, Coahuila.
La tranza o el engaño consiste en lo siguiente: dicho señor se desplaza en un camión de tres toneladas, en el cual traía de 8 a 10 sementales caprinos de una supuesta raza muy buena productora de leche, de la cual esta persona argumentaba que era tan buena productora que hasta 4 tetas tienen, como una vaca, además de lo anterior los caprinocultores de la región se iban con la finta, como comúnmente se dice, al observar la corpulencia del semental, ya que no se conocían en esos años las características y virtudes de esta raza en la Comarca Lagunera, que resultó ser la raza Boer, la cual se caracteriza por ser una raza productora de carne, que no llega a más de 1 litro de leche diaria y que la duración de la lactancia es de 100 días, esta raza es originaria de Sudáfrica, las orejas son de tamaño mediano y colgantes como las de la nubia, cuernos redondos y hacia atrás, perfil convexo, el color es blanco y en la cabeza ligeramente rojizo oscuro, las hembras adultas llegan a pesar hasta 90 Kgs. y los machos hasta 120 Kgs.
Esta persona, que algunos caprinocultores señalan como “el viejo del medallón”, ya que trae una medalla de un diámetro exagerado, les garantizaba un incremento notable en la producción de leche, con esos excelentes sementales de una raza nueva. Para lo cual se les pedía a cambio 6 ó 7 hembras escogidas del rebaño, por un semental, que posteriormente resultaba que las hijas de tal semental disminuían la producción de leche, que es el objetivo primordial de la producción de esta especie en la Región Lagunera.
Esta misma persona ha seguido engañando en estas fechas, con otras supuestas innovaciones. Por lo cual se debe tener mucho cuidado con las buenas y acomedidas personas que llegan a cambiar cabras o crías, engañando como este nocivo elemento de la caprinocultura, que Dios quiera y las autoridades tomen cartas en el asunto y prevengan, controlen y den el tratamiento efectivo para la erradicación de este mal o enfermedad.
En otro aspecto, va nuestra felicitación para el Ing. Francisco Javier Vaquera Alvarado, a quien recientemente se le asignó el cargo de encargado de la Delegación de la S.A.G.A.R.P.A, en la Región Lagunera, sabemos de las virtudes y cualidades del Ing. Vaquera, (junto con el Dr. Fernando Garza diseñaron el programa de Rescate de hembras caprinas) por lo cual nos congratulamos por tal acontecimiento, ya que será un apoyo para la caprinocultura regional, ya que conoce la problemática de dicha especie.