Helicópteros artillados surcan los cielos, francotiradores están apostados en los edificios más altos y miles de tropas patrullan las calles de Bogotá para evitar incidentes hoy domingo durante la breve visita del presidente estadounidense George W. Bush a este país andino que vive un largo conflicto armado y libra una guerra contra las drogas.
El control en esta ocasión es extremo. Más de siete mil efectivos policiales y militares cuidan de las calles que Bush recorrerá en la capital y otros 14 mil están apostados por toda la ciudad o en retenes en los que requisan masivamente a transeúntes, pasajeros del transporte colectivo o automovilistas.
La Fuerza Aérea Colombiana tiene listas a 40 tripulaciones para ?efectuar misiones de patrullaje, reconocimiento, escolta, evacuación y defensa aérea? en un plan que integra a ?helicópteros de ataque, aviones interceptores y plataformas de inteligencia?, informó en un comunicado la institución.
Este amplio operativo apunta a ?garantizar la completa tranquilidad durante la visita del presidente de Estados Unidos?, explicó la secretaría presidencial de prensa.
La Policía nacional reveló esta semana que han interceptado comunicaciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) donde se dan algunas órdenes ?para efectuar actos que alteren el orden? a propósito de la visita, pero en concreto no se ha descubierto ninguna acción definida de la principal guerrilla izquierdista del país.
Sin embargo, las FARC en el pasado han golpeado esta capital como en agosto de 2002, cuando en la toma de posesión del mandatario Álvaro Uribe una andana de granadas de mortero cayó en inmediaciones del palacio presidencial matando a más de 20 personas.
Adicional a la masiva presencia de las Fuerzas de Seguridad, que esculcaron hasta las alcantarillas, se prohibió el porte de armas a todos los ciudadanos, la circulación de pasajeros en motocicletas -técnica usada por los sicarios-, el transporte de escombros o mudanzas, el consumo de alcohol y hasta patinar o montar bicicleta por arterias que como hoy domingo están destinadas a esos usos.
