El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, encabezó hoy en Brasilia los festejos oficiales por el 185 aniversario de la independencia del país, incluido un desfile militar ante miles de personas.
Lula abordó junto a su esposa Marisa Leticia el automóvil Rolls Royce presidencial y realizó un recorrido por la Explanada de los Ministerios para saludar a unas 30 mil personas que se congregaron con motivo de los festejos.
El mandatario, que se mantuvo de pie al interior del auto descapotable durante todo el recorrido, fue saludado con aplausos y gritos de apoyo, situación que contrastó con los abucheos que recibió en julio pasado en la apertura de los Juegos Panamericanos.
La Policía Militar del Distrito Federal estimó que unas 30 mil personas llegaron hasta la Explanada de los Ministerios para asistir al desfile con motivo de la Independencia de Portugal declarada el 7 de septiembre de 1822.
Marisa Leticia vistió, al igual que en otras ocasiones, un traje que tenía los colores de la bandera de Brasil, verde y amarillo, además de un sombrero artesanal.
Junto a Lula estuvieron en el palco de honor el vicepresidente José Alencar y los ministros de Defensa, Nelson Jobim, y de Justicia, Tarso Genro, además de los comandantes de las Fuerzas Armadas y el gobernador del Distrito Federal, José Roberto Arruda.
Medios de prensa locales señalaron que la conmemoración de la Independencia en Brasilia tuvo un costo para el Estado de un millón 100 mil dólares, un 41 por ciento más que lo gastado el año pasado.
En Sao Paulo, en tanto, los actos por la Independencia estuvieron encabezados por el opositor gobernador José Serra, quien presidió un desfile cívico-militar en el sambódromo.
En Río de Janeiro, por otra parte, los asistentes al desfile cívico-militar en la céntrica Avenida presidente Vargas abuchearon a las autoridades presentes en la ceremonia.
El acto estuvo encabezado por el secretario estatal de Seguridad Pública, José Mariano Beltrami, quien representó al gobernador Sergio Cabral.
Beltrami y el comandante de la Policía Militar, coronel Ubiratan Angelo, fueron abucheados durante su presentación en la ceremonia por gran parte de las 10 mil personas que asistieron al acto.
La Policía de Carreteras implementó en las últimas horas un plan especial de seguridad, que incluyó nueve mil agentes en todo el país, debido a la gran cantidad de personas que aprovecharon de salir fuera de sus ciudades para aprovechar los tres días festivos.
