CELOS, APARENTE CAUSA DE MATANZA EN EU
WISCONSIN, EU., (AGENCIAS).- “Éste no era el Tyler que conocíamos y queríamos”, señaló ayer la familia Peterson en un comunicado para sus vecinos. El domingo pasado, su hijo, un joven policía de 20 años, había asesinado a su ex novia y los seis amigos que se encontraban con ella en lo que parece ser el trágico resultado de una pelea de enamorados.
El policía que causó la matanza fue abatido por sus compañeros cuando intentaba negociar la rendición.
En el pueblo de Crandon (Wisconsin), donde ocurrió la última masacre americana, la mayor parte de sus escasos 2 mil habitantes se inclinaba por la teoría de un ataque de celos. Sólo algunos amigos de Tyler repudiaban esa versión. Todos los que le conocían coincidían en describirlo como “un buen chico, muy simpático, la última persona de la que hubieras esperado algo así”, dijo Karly Johnson, una compañera de instituto, que compartió colegio con todas las víctimas.
A las 2:47 horas, Tyler apareció en la casa donde siete adolescentes pasaban la noche del sábado. Discutieron, salió iracundo, tomó su rifle del coche y volvió a la casa. Tuvo que forzar la entrada y una vez dentro disparó treinta cartuchos. Sólo quedó un adolescente con vida, en estado crítico.
