Britney Spears y Christina Aguilera son famosas a su modo
MÉXICO, DF.- Juntas dieron sus primeros pasos en el mundo de la farándula: a los 11 años de edad, Britney Spears y Christina Aguilera se convirtieron en conductoras del programa de televisión Mickey Mouse Club, diez años después se consolidaron como jóvenes divas del pop y la competencia entre ellas fue inevitable.
Ambas estrellas probaron las mieles del éxito, se casaron y sus vidas privadas ya no lo fue más.
Aunque Spears y Aguilera tienen una historia que compartir, es inevitable que mientras estas dos amigas desearon juntas convertirse en estrellas de la música, Britney se derrumbe cada día más con sus crisis emocionales, mientras Christina brilla por sus dotes vocales y se congratula por sus múltiples premios y altas ventas.
He aquí un recuento de cómo este par de rubiecitas llegaron simultáneamente a la cima, y cómo sus carreras han tomado diferentes caminos, colocándolas en “el ojo del huracán”.
Las niñas que querían cantar
Desde su niñez, Britney Spears y Christina Aguilera ya sostenían cierta empatía: provenientes de familias de bajos recursos, ambas fueron dotadas de una voz que sobresalía del resto de la gente.
Participaron en concursos locales, y su destreza para el baile las llevó hasta el Mickey Mouse Club, en el que ambas compartieron créditos con Justin Timberlake (quien después sostendría un romance con Britney Spears) y Keri Russell.
Después de que dicho programa de televisión terminara, ambas decidieron que debían buscar a un representante que las llevara por el camino del éxito.
Britney fue a dar con Larry Rudolph, en Nueva York, mientras que Christina prefirió no cambiar su apellido, no obstante que sus publirelacionistas se lo recomendaron, si es que pretendía llevar su carrera como intérprete.
Sólo el tiempo marcaría lo que el destino les tenía reservado.
El camino a la fama
En 1998, Britney acaparó la atención de la crítica cuando apareció como una sensual colegiala cantando Baby... one More Time.
Christina, en tanto, se mostraba como una chica sexy, pero no al grado de ser una “femme fatale”.
Ambas comenzaron con el pie derecho sus carreras en el llamado mainstream: Britney vendió 35 millones de Baby... one More Time, mientras que Aguilera vendió 16 millones de su álbum debut homónimo. Además, Christina también se fijó la meta de conquistar el mercado hispano, por lo que en el año 2000 lanzó Mi Reflejo, un álbum totalmente en español con el que según ella pretendía rendir honor a sus raíces latinas (su padre es ecuatoriano).
Identidad camaleónica
Poco a poco, Christina Aguilera se convertiría en una intérprete con identidad camaleónica, y su voz logró darle su primer premio Grammy en 2000, en la categoría de Mejor Artista Nuevo.
Britney, por su parte, se hizo acreedora al codiciado gramófono cuatro años después.
Al igual que Spears, Christina ha sido una chica polémica.
No es un secreto su romance con el rockero Fred Durst (Limp Bizkit) y recientemente llamó nuevamente la atención de la prensa farandulera, cuando reveló que gustaba de cocinar desnuda los domingos con su marido, Jordan Bratman.
También ha posado desnuda para las revistas GQ, Maxim, FHM, Blender y Rolling Stone.
La intérprete de El Genio en la Botella también ha revelado que una de sus máximas influencias es Madonna, y es por ello que no resulta extraño ver a Aguilera en diferentes facetas que la han llevado a trabajar con la fotógrafa Floria Sigismondi, quien ha colaborado entre otros con Marilyn Manson y David Bowie.