El presidente estadounidense, George W. Bush, y el general Guy C. Swan rinden homenaje a los muertos en las guerras de Irak y Afganistán. (EFE)
El presidente estadounidense rindió tributo en el Cementerio Nacional de Arlington, a los miles de muertos de Irak en el Día de los Caídos.
Con el precedente de más de tres mil 400 soldados estadounidenses muertos en Irak, el presidente George W. Bush rindió hoy tributo a lo que calificó como la 'nueva generación de héroes' caídos en lugares como Kabul, Kandahar, Bagdad o Ramadi.
En una ceremonia luctuosa celebrada en el Cementerio Nacional de Arlington, Virginia, Bush depositó la tradicional ofrenda floral que honra la memoria de los muertos en conflictos como la Segunda Guerra Mundial, la de Corea, Vietnam y más recientemente Irak y Afganistán.
'Estos suelos reciben una nueva generación de héroes: Hombres y mujeres que dieron sus vidas en lugares como Kabul, Kandahar, Bagdad o Ramadi', dijo ante familias de los soldados muertos, con las que había realizado una reunión personal antes del acto.
'Como aquellos que vinieron antes, ellos no querían la guerra.
Pero respondieron al llamado cuando vino. Creyeron en algo más grande que ellos. Lucharon por su país y nuestro país se une para darles duelo como si fueran uno sólo', declaró.
La ceremonia se produjo en momentos que la guerra de Irak ha cobrado la vida a más de tres mil 450 soldados estadunidenses y que es impopular para una mayoría de la población.
Miles de personas viajan anualmente a la capital estadounidense y a Arlington a recordar a familiares o amigos caídos en combate.
Alrededor de la Elipse de Washington podían verse grupos de familias llevando a cabo homenajes personales.
Bush consideró el acto como 'el más grande recordatorio' a los soldados estadunidenses muertos en las guerras.
'El tributo más duradero está a nuestro alrededor. Un país donde los ciudadanos tienen el derecho de adorar a quien quieran, marchar por lo que creen y decir lo que piensan', señaló.
La conmemoración del Día de los Caídos incluyó además un desfile por la Avenida Constitución de la capital, que conecta a la Casa Blanca y el Capitolio, así como los monumentos a los caídos en la Segunda Guerra Mundial y en Vietnam.
