El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se manifestó hoy "profundamente consternado" por el tiroteo que dejó nueve muertos, incluido el atacante, en un centro comercial de la ciudad de Omaha (Nebraska).
"Sus pensamientos (de Bush) y sus oraciones están con las víctimas y sus familiares esta tarde", señaló Dana Perino, portavoz de la Casa Blanca.
El incidente ocurrió pocas horas después de que el presidente visitara la ciudad para participar en un acto de recaudación de fondos para la campaña electoral del Partido Republicano.
Perino señaló que tras entrevistarse con muchos miembros de la comunidad de Omaha, el presidente confía en que se harán fuertes "a la hora de afrontar esta terrible tragedia".
Además de los nueve muertos, el incidente ocasionó heridas a cinco personas, dos de las cuales fueron ingresadas en estado grave en un hospital de la ciudad.
Según una portavoz policial, el autor del tiroteo se suicidó tras matar a ocho personas.