Bush quiere una Cuba libre una vez fallezca el presidente Fidel Castro. (EFE)
El presidente George W. Bush pidió el miércoles a la comunidad internacional trabajar juntos para lograr la "libertad del pueblo cubano" y prometió mantener el embargo comercial de Estados Unidos hasta que se haya logrado ese propósito.
"Este es el momento de ponerse de lado del pueblo cubano que busca su libertad", dijo. "Este es el momento del mundo para dejar sus diferencias y prepararse para la transición en Cuba hacia un futuro de libertad, progreso y promesa".
Bush quiere una Cuba libre una vez fallezca el presidente Fidel Castro.
Aprovechando el delicado estado de salud del mandatario cubano, Bush se pronunció exclusivamente sobre la isla en un discurso en el Departamento de Estado. Castro lleva a su vez 15 meses sin aparecer en público desde que se sometió a una operación intestinal y cedió los poderes a su hermano Raúl.
En sus ocho años de gestión, Bush formó una comisión multisectorial para apoyar la transición a un gobierno que, según Washington, debería ser democrático y respetuoso de las instituciones y libertades.
"También pido a nuestro Congreso mostrar su apoyo y solidaridad con el pueblo cubano manteniendo nuestro embargo contra la dictadura hasta que ésta cambie", dijo Bush ante un auditorio donde se encontraban familiares de varios opositores cubanos encarcelados.
Indicó que el gobierno cubano usaba el embargo estadounidense de casi cinco décadas "como el chivo expiatorio de las miserias cubanas".
Pero, dijo que las dirigencias de los dos partidos políticos estadounidenses entendían que la razón de esas miserias no era el embargo, sino "el sistema comunista".
"Saben que el comercio con Cuba no ayudará al pueblo cubano en tanto no se hayan hecho en Cuba cambios en el sistema económico", agregó. "El comercio con Cuba sólo enriquecerá y aumentará el poder y reforzará su permanencia en él de los actuales dirigentes".