El presidente Felipe Calderón Hinojosa, durante el evento 'Sociedad y Gobierno trabajando por el desarrollo', que tuvo lugar en el centro cívico del municipio de Huamantla, en Tlaxcala. (Notimex)
Después de haber presentado la iniciativa de reforma fiscal, el presidente Felipe Calderón convocó a los mexicanos a ser solidarios con el gobierno para sacar adelante esta iniciativa que busca "abatir la pobreza y la desigualdad que padecen millones de mexicanos".
El titular del Ejecutivo, encabezó un evento denominado "Sociedad y Gobierno Trabajando por el Desarrollo", y sostuvo que éste es el espíritu que se requiere: "Ese es el espíritu de la reforma hacendaria que he enviado al Congreso de la Unión, una reforma que convoca a las solidaridad a favor de los que menos tienen para construir un México más justo y equitativo".
Dijo que está convencido de que ser solidario implica no sólo ser responsable del destino propio sino también del destino de los demás; ésa, sostuvo, "es la clave de la esencia del ser humano".
Planteó que la pobreza y la desigualdad que afecta a millones de mexicanos es el primer obstáculo de desarrollo por lo "que éste no podrá ser un país desarrollado, próspero y fuerte mientras la mitad de su población siga viviendo en condiciones de pobreza".
Acompañado por el gobernador de la entidad, Héctor Ortiz Ortiz, el presidente de la República reconoció que el papel del gobierno es central para alcanzar las metas de la justicia social.
Pero "siendo central el papel del gobierno no puede hacerlo solo y muchas veces no lo hace tan bien como lo hace una sociedad civil".
Afirmó que por ello el fortalecimiento de la sociedad y de sus instituciones es un factor para alcanzar mayores niveles de bienestar y promover la reducción de la desigualdad en el país.
De esta forma, dijo el mandatario, autoridades y sociedad civil "tenemos que hacer equipo". En ese sentido aseguró que el gobierno hace la tarea; ése "es mi compromiso: ayudar al que más lo necesita, pero generalmente el gobierno hace su tarea porque es su deber porque está obligado legalmente".
Pero cuando la sociedad civil lo hace por convicción, expresó, por creencia, por compromiso, los resultados se multiplican.
El presidente Calderón subrayó que la fraternidad y la caridad son valores y virtudes más poderosos que cualquier otro.
Pues a final de cuentas "dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, atender al enfermo o desvalido son tareas y fuerzas poderosas capaces de mover a la sociedad y a la humanidad, y por eso deben ser reconocidas y apoyadas".
Al entregar apoyos de proyectos sociales y productivos, el mandatario se pronunció por la corresponsabilidad entre sociedad y gobierno y adelantó que este año se destinarán casi 200 millones de pesos mediante el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) para impulsar la participación de la sociedad.
Aclaró que su gobierno no busca suplantar el esfuerzo de los ciudadanos; la intención, apuntó, "es promover y no sustituir las iniciativas de los ciudadanos en materia de justicia y desarrollo".
Por último, confió en que con el apoyo de todos se pueda aumentar la capacidad del Estado para dar a los que menos tienen las condiciones de vida que merecen y no han conseguido. "Con esta reforma se busca enfrentar la lucha contra la pobreza y desigualdad; es para acelerar el paso con el compromiso que todos tenemos con la justicia porque no hay caridad sin justicia", remarcó el presidente Calderón.