Benedicto XVI nació el 16 de abril de 1927 en Marktl Am Inn, poblado de la región de Baviera y varios de sus paisanos estuvieron presentes durante la misa en su honor. (AP)
Agradece Benedicto XVI su larga vida y el apoyo de la iglesia Católica.
El Papa Benedicto XVI celebró su cumpleaños número 80 con un día de adelanto, con una misa realizada en su honor en los escalones llenos de flores de la Plaza de San Pedro, dando gracias por su larga vida y el apoyo de la Iglesia Católica.
Cardenales, sacerdotes y decenas de miles de fieles se unieron al Papa para darle gracias a Dios por su larga vida, así como por su elección como Pontífice el 19 de abril de 2005.
Benedicto XVI nació el 16 de abril de 1927 en Marktl Am Inn, poblado de la región de Baviera y varios de sus paisanos estuvieron presentes durante la misa: hombres y mujeres vestidos de la manera tradicional, con sombreros con plumas y pantalones cortos. Los peregrinos ondearon banderas alemanas cuando el Papa los saludó en su lengua.
El Vaticano ha invitado a los fieles para que se unan al Papa en lo que Benedicto XVI calificó como una reflexión sobre su “nada corta” existencia.
Benedicto expresó su gratitud a los presentes y dijo que le transmitía “mi más sincero agradecimiento, desde lo más profundo de mi corazón, a toda la Iglesia, que como una verdadera familia, especialmente en estos días, me rodea con su afecto”.
El Papa pareció sentirse reanimado por la multitud y luego del servicio aplaudió al ser sacado de la plaza en un vehículo blanco descapotado. Benedicto XVI parece encontrarse en buen estado físico. Camina con paso seguro, suele estar de pie incluso durante los actos públicos de mayor duración y su primer libro como Pontífice es esperado hoy lunes en las librerías.
Su energía parece permitirle sobrellevar sus fuertes actividades. El miércoles, se reunirá con el nuevo secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, en el Vaticano y durante el fin de semana realizará un peregrinaje nocturno al norte de Italia. A inicios de mayo, viajará a Brasil, donde la Iglesia Católica ha empezado a perder fieles ante las iglesias evangélicas protestantes.
Desde que se convirtió en Papa, Benedicto XVI ha dedicado muchos de sus esfuerzos en mejorar las relaciones con otras religiones, así como entre las denominaciones cristianas y en reconocimiento a ello, Bartolomeo I, dirigente de los cristianos ortodoxos del mundo, mandó a un representante, el religioso Ioannis de Pergamon.
El Pontífice dijo esperar que el diálogo entre los ortodoxos y los católicos continúe “con mayor energía”.