Garantiza la Canirac que los restaurantes formales cumplen con las normas de higiene y calidad.
La compra en insumos se hace en estricto apego a normas sanitarias, aseguran
El Siglo de Durango
Los restaurantes siguen un estricto control de calidad e higiene en la compra de sus insumos; por lo tanto, descartan que haya problemas de productos contaminados. El riesgo real se ve en los comedores callejeros ya que, incluso, pueden comprar en carnicerías clandestinas, consideró Roberto Álvarez Smith, integrante del Consejo Consultivo de la Canirac.
El inversionista local indicó que los integrantes de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) son supervisados constantemente por parte de las autoridades sanitarias.
“El 80 por ciento de nuestros insumos los manejamos con proveedores locales, pero sí tenemos muchos controles de lo que estamos comprando, sí hemos visto que a veces vienen las calidades no como deben de ser pero inmediatamente, ya conocemos y sabemos qué debemos hacer, pues todo se tiene que checar”, detalló el ex presidente del organismo empresarial.
“Que ahora esté saliendo que hay mucha mosca, que hay irregularidades en el Rastro es una tristeza para nosotros los restauranteros. Sí también vemos que también hay ciertas cosas que no conseguimos aquí y no los traen de Torreón”, platicó.
En el caso de su negocio, expuso que requiere mucho filete y el 80 por ciento de la carne que compra la adquiere en la Comarca Lagunera porque no hay suficiente volumen para todo el sector de la localidad.
“Hasta ahorita no he tenido queja alguna de que nos llegue la carne en mal estado. Los proveedores que tenemos tienen sus registros, medidas de seguridad, por lo regular consumimos en carnicerías grandes para que nos puedan dar el volumen que nosotros queremos”, complementó.
Los restaurantes duranguenses se han preparado mediante diferentes cursos, han cambiado positivamente en la última década. “Salubridad está muy fuerte en cuestión de las inspecciones, ha habido una mejora muy grande en los restaurantes”, expresó.
“Los vendedores de la calle en ocasiones compran lo más barato, inclusive, compran carne en carnicerías clandestinas, hay informalidad en todo, en el caso de los restauranteros nuestros proveedores deben estar bien registrados, no podemos comprar si no es así, debe tener todas sus normas de seguridad”, opinó.
Álvarez Smith señaló que se debe tener cuidado en todos los negocios que laboran en la informalidad, pues esto es un peligro para consumir alimentos en malas condiciones.
DEFENSA
Miriam Centeno Ferreira, titular de la Dirección Municipal de Salud Pública y Medio Ambiente, afirmó que la situación de rastros clandestinos está bajo control.
-No existen rastros clandestinos en la capital duranguense, ni se han recibido denuncias en ese sentido por parte de la ciudadanía.
-Descartó que sea una necesidad contar con un rastro propio por parte del Municipio, ya que la demanda del servicio ha sido suficiente con los dos rastros que tienen concesionados.
-En cuanto a la cantidad de elementos de inspectores municipales que vigilan las condiciones en que es trasladada la carne, la entrevistada dijo que son dos en cada rastro.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.