Señala el procurador general que los ataques a Pemex son actos de terrorismo.
Los explosivos plásticos utilizados en los actos de sabotaje perpetrados el lunes en ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Veracruz y Tlaxcala, son similares a los que se emplearon en los ataques de julio pasado a instalaciones de la paraestatal y uno de los explosivos es de origen checoslovaco, confirmaron ayer los peritajes realizados por la Procuraduría General de la República (PGR).
De acuerdo con los dictámenes preliminares, en los ataques que reivindicó el Partido Democrático Popular Revolucionario-Ejército Popular Revolucionario (EPR), se utilizaron agentes explosivos plásticos conocidos como Anfo y Semtex, a los que se añadió otra mezcla explosiva que contenía -entre otras sustancias-, nitrato de potasio, que es uno de los componentes de la pólvora, revelaron autoridades de la dependencia.
Aunque los especialistas en incendios y explosivos de la Dirección General de Servicios Periciales aún no concluyen los peritajes, las autoridades consultadas indicaron que se ha encontrado el mismo patrón en los sabotajes: también se utilizó un reloj y una pila, que permitieron detonar el material y cronometrar los estallidos, para que éstos se produjeran de forma simultánea a las 2:00 horas del 10 de agosto.
Se detalló que los expertos analizan las cantidades de explosivos empleadas en cada una de las seis explosiones registradas, a partir del daño que provocaron; también se busca determinar todas las sustancias que se utilizaron para su elaboración, como indicios que eventualmente pudieran servir para rastrear el origen de los explosivos, así como a los autores materiales de estos atentados.
Aunque el explosivo plástico Anfo -que es una mezcla de nitrato de amonio con petróleo-, se usa comúnmente en la minería y para demoliciones, por lo que no resulta difícil de obtener, detallaron las autoridades.
En este sentido, las pistas pudieran estar en la utilización del Semtex, que es un explosivo plástico que se utiliza de forma comercial en demoliciones y en ciertas aplicaciones militares; pero debido a que en los últimos años ha sido empleado en atentados terroristas, su importación es regulada y restringida por el Gobierno de Checoslovaquia, donde se producen sólo 10 toneladas de este explosivo al año.
Por ello, la PGR investiga la forma en que los responsables de los ataques pudieron proveerse de este tipo de explosivo, aunque un informe de la propia dependencia señala que la Unidad Especializada en Investigación de Terrorismo, Acopio y Tráfico de Armas no cuenta con registros o casos de robo o tráfico ilícito de explosivos.
Por su parte, el procurador general de la República, Eduardo Medina-Mora, aseguró que las recientes explosiones registradas en ductos de Pemex, son actos de terrorismo y sabotaje que ya están investigándose.
Entrevistado al término de la ceremonia de conmemoración del 160 Aniversario de la Gesta Heroica de los Niños Héroes, el procurador reveló que los exámenes periciales iniciados como parte de las líneas de investigación, están por concluirse.
“Es pertinente subrayar que se trata de actos criminales que constituyen una conducta típica de terrorismo y sabotaje, que son actos en contra del pueblo de México, no sólo en términos de la infraestructura, sino que afectan directamente los empleos de familias”, expresó.
“De manera que éstos no son actos de reivindicación social o política. No hay ninguna justificación para realizar acciones de este tipo”.
Urge EU a resolver ataques
Encontrar y castigar a los culpables de los actos de sabotaje contra ductos de Pemex debe ser de las más altas prioridades del Gobierno mexicano, pues de lo contrario varios grupos pueden tomar este tipo de acciones como ejemplo, advirtieron expertos antiterrorismo en Estados Unidos.
“Se debe convertir en uno de los esfuerzos de Inteligencia más altos. No sólo por el daño económico y el tamaño de los eventos recientes sino porque puede haber un escalamiento y no se sabe cuál podría ser el siguiente paso”, dijo, Fred Burton, vicepresidente de Stratfor, consultoría texana en seguridad que asesora a clientes en México.
“El problema mayor es que entre más tiempo operen, existe cada vez más posibilidad de que otros grupos copien lo que están haciendo”, alertó John Robb, experto en análisis de acciones terroristas contra sistemas de infraestructura.
Aún cuando ocurrieron por la madrugada sin la intención aparente de provocar daños humanos, las acciones del Ejército Popular Revolucionario (EPR) contra infraestructura energética ya mostraron a otros grupos criminales puntos débiles.
“Otros grupos pueden adoptar tácticas similares y si se alcanza una masa crítica de grupos participando es imposible detenerlos”, señaló Robb, quien recordó que algo similar ha ocurrido en atentados contra energéticos en Irak, Nigeria y Paquistán.
Si bien en México, el EPR ha escogido únicamente atentar contra blancos poco protegidos y en lugares alejados de grandes poblaciones, la colocación de los explosivos -según Robb- parecen bien estudiados para afectar la economía.
En un reporte electrónico, el Consejo Asesor de Seguridad en el Exterior del Departamento de Estado (OSAC) afirmó ayer que empresas estadounidenses habían sido afectadas por fallas en el suministro de gas derivada del sabotaje.
“Varias compañías de EU han detenido su producción o están utilizando reservas de gas de emergencia para continuar operando”, dice el OSAC sin dar más detalles.
“Los ductos que explotaron son arterias importantes que surten al centro de México incluyendo a las ciudades más grandes de México, la Ciudad de México y Guadalajara”, agregó el OSAC, constituido por funcionarios y el sector privado de Estados Unidos.