Autoridades de Chiapas notificaron ayer que 3,500 personas desalojadas por el desfogue del río Grijalva, deberán permanecer en los albergues. (El Universal)
Los 3,500 chiapanecos que fueron desalojados por el desfogue del Grijalva, deberán esperar más para volver a sus casas.
La resignación a permanecer más tiempo en los refugios temporales llegó a los albergues como una mala nueva de la Navidad y el Año Nuevo.
Las 3 mil 500 personas que fueron evacuadas de manera preventiva de las últimas 16 de un total de 33 comunidades en riesgo asentadas a lo largo del río Grijalva, deberán esperar más para volver a sus lugares de origen.
Ayer, las autoridades les expresaron que no existen condiciones para el retorno inmediato, debido a las inundaciones que provoca el desfogue del río Grijalva, tras el retiro del “tapón” y la apertura del canal de desagüe hacia la presa de Peñitas.
A cuatro días de iniciar el desfogue de las aguas, fueron reportadas inundaciones en poco más de medio centenar de humildes viviendas en ocho comunidades y rancherías de las márgenes del Grijalva.
Las autoridades previeron la valoración del retorno luego de 72 horas del desagüe, después de lo cual se determinarían las probabilidades de retorno, dependiendo de las condiciones y la seguridad, pero debido a las inundaciones y el aumento creciente de los niveles del líquido, se determinó esperar al menos una semana más, con el fin de observar la situación y en su caso fijar una segunda fecha tentativa para el regreso de las familias desalojadas.
Salvador Cervantes, responsable de Comunicación de la Subsecretaría de Protección Civil del estado, indicó en entrevista que desde ayer empezó a informarse a las familias que deberán permanecer en los cinco albergues instalados en los municipios de Ostuacán, Tecpatán.
“Se les indicó que tendrán que mantenerse a la espera de una nueva fecha tras comprobarse que existen condiciones de seguridad para el retorno a sus comunidades.
Se les notificó con oportunidad a quienes se encuentran en los refugios temporales como también a las personas que están en domicilios de familiares, parientes y amigos según el esquema de Familias Solidarias, que por el momento no podrán regresar, agregó.
De las personas que fueron evacuadas, 2 mil 566 están en casas particulares, con sus familiares o amigos y los restantes 934 en albergues temporales. “Éstos no podrán volver a sus hogares en estos días, así que pasarán la Navidad y recibirán el Año Nuevo en los refugios al lado de sus seres queridos y vecinos”, explicó.
El Gobierno Estatal reportó ayer inundaciones en medio centenar de casas de ocho poblados de las márgenes del río Grijalva, anegados luego de que el martes pasado se retiró parte del “tapón” y se abrió el canal para la reanudación de las corrientes, frente a la desaparecida comunidad Juan de Grijalva.
Los torrentes inundan al menos 15 viviendas del ejido de Rómulo Calzada, 13 en Nuevo México y el resto están dispersas en los poblados Santos Degollado, La Palma, Paso Esperanza de los Pobres, La Jobi, Roberto Barrios y Genaro Vázquez.