Elementos de la Policía Estatal Preventiva intentan cubrirse de los proyectiles que les lanzan desde el interior de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. (El Universal)
Exigen a la rectoría mayores recursos para las 54 Casas del Estudiante mantenidas por el Gobierno Estatal.
Estudiantes de la Coordinadora de Universitarios en Lucha (CUL) y alumnos de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), protagonizaron ayer dos enfrentamientos, luego que integrantes de esa organización tomaron desde las siete de la mañana las instalaciones universitarias y cerraron los accesos. Esto, para exigir a la rectoría mayores recursos para las 54 Casas del Estudiante mantenidas por el Gobierno Estatal, así como facilidades para inscribirse.
Al calor de los choques entre ambos bandos, los de la CUL secuestraron a cinco estudiantes, a dos de los cuales rociaron gasolina y amenazaron con prenderles fuego, pero después los liberaron.
Los alumnos de diversas facultades que arribaban con la intención de tomar clases, se agruparon e intentaron ingresar por la fuerza al campus universitario, ubicado en el fraccionamiento Villa Universidad, al sur de Morelia, originando la primera zacapela, en la que llovieron piedras, palos, tubos y bombas molotov.
El choque se prolongó hasta las 11 de la mañana, resultando al menos ocho estudiantes heridos y severos daños a viviendas cercanas, facultades y vehículos estacionados sobre la avenida Francisco J. Mújica.
Un centenar de granaderos llegó hasta el lugar, pero no interfirió en el enfrentamiento, argumentando que la “autonomía universitaria” les impedía el paso al interior del campus universitario.
A lo largo de la mañana, los alumnos de las diversas facultades se dispersaron y se dirigieron a las Casas del Estudiante Nicolaíta, Isaac Arriaga y Dos de Octubre, las tres ubicadas en diversos puntos de esta ciudad.
Aprovechando que la mayor parte de los habitantes de estos albergues se encontraba en el campus universitario, los estudiantes en favor de recibir clases entraron a estas casas, robaron colchones, computadoras y otros enseres que quemaron a las afueras de los inmuebles, para exigir a la CUL su salida de la universidad.
Así, el director de Seguridad Pública en Michoacán, Mario Bautista Ramírez, ordenó a los granaderos dividirse en dos grupos para resguardar el inmueble universitario y arrestar a quienes realizaban quemas en el centro moreliano.
Al evitar que los alumnos de las facultades de Ingeniería prosiguieran dañando el patrimonio de la CUL, los granaderos persiguieron a los inconformes hasta la plaza Carrillo, al sur del primer cuadro de esta capital, donde ambos grupos universitarios se toparon e iniciaron el segundo enfrentamiento, cerca del medio día.
En este lugar, Bautista Ramírez fue alcanzado por un palo, que le provocó la fractura del brazo izquierdo.
Luego de ser atendido de la fractura en su brazo, Bautista Ramírez pidió el apoyo de las fuerzas federales para evitar que su corporación sea rebasada en nuevos conflictos estudiantiles.
La administradora de la UMSNH no descartó que el conflicto universitario pueda tener tintes políticos, pero se manifestó por que no sea así.
Por la noche, el campus universitario se mantenía aún tomado por los estudiantes de la CUL, y el paro se extendió a cinco preparatorias de la UMSNH del municipio de Uruapan.
