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Clandestino| Relatos de andar y ver

Ernesto Ramos Cobo

¿Alguno de ustedes ha escuchado “Clandestino”, de Manu Chau? Habla de los migrantes, de los desaparecidos, de Tijuana… ¿lo han oído? Consideraciones diversas sobre el tema principal de ese disco es el propósito fundamental de estas letras.

Creemos que hoy más que nunca es necesario atender el drama de la migración y situar el tema como punto toral de las políticas mundiales. Es necesario fortalecer los mecanismos que limiten las conductas derivadas de la vulnerabilidad (abusos, explotación, vejaciones) e implementar políticas públicas que procuren la integración de los migrantes en condiciones de igualdad. Buscar desde ahora consensos objetivos para mitigar el drama que se vive diariamente en todos los rincones del mundo. Dejar a un lado la indiferencia, apatía e insensibilidad que gobiernos y sociedad civil han compartido sobre el tema.

Los datos duros están a flor de piel: (I) hay cerca de 200 millones de migrantes internacionales, equivalente a la población entera del Brasil, el quinto país más poblado del orbe; (II) el 3% de la población mundial es migrante internacional, es decir, 1 de cada 35 personas; (III) los 80 millones de migrantes en 1970 elevaron su número a 175 millones en el año 2000 y a cerca de 200 millones al día de hoy; (IV) Estados Unidos tiene más de 10 millones de migrantes en situación irregular siendo más de la mitad mexicanos; (V) anualmente ingresa a suelo estadounidense cerca de 500 mil personas pese a los operativos fronterizos; (VI) anualmente mueren en las pateras mediterráneas cerca de 2,000 mil personas, pereciendo cerca de 400 personas anualmente en pos del cruce ilegal en nuestra frontera norte; (VII) el mercado laboral no estructurado ruso comprende cerca de 4 millones de personas, principalmente de países ex soviéticos y del sudeste asiático; (VIII) las remesas oficiales mundiales representan aproximadamente el triple del valor de la ayuda oficial al desarrollo; (IX) cerca de 45% de la población del África Subsahariana gana menos de un dólar diario; (X) Los responsables del tráfico ilícito de migrantes y de la trata de seres humanos, generan ingresos estimados anuales de 10,000 millones de dólares. Continuar con la enumeración podría convertir esta página en un jeroglífico de números romanos.

La migración y la globalización tienen vastos puntos de contacto. La disparidad entre las naciones se traduce en comunidades de origen y de destino, y en aquéllas están las razones principales de los números crecientes: precarias condiciones democráticas, falta de oportunidades para el desarrollo, inestabilidad demográfica, ingobernabilidad, abuso a los derechos humanos, entre otros.

¡Cerca del 45% de la población de África Subsahariana gana menos de un dólar diario! Son dramas que van de la mano del incremento de las personas en movimiento: abandonos y abusos de “coyotes”, explotación de los empleadores y terratenientes, redes hambrientas en la industria del sexo, compañías trasnacionales buscando el negocio de las remesas, autoridades que con operativos nocturnos deportan a familias enteras. Una situación desbordante que se oculta detrás de las letras de ese diario que rápido hojeamos.

Usualmente hay división de opiniones ante el tema migratorio. Por un lado grupos antiinmigrantes, encargados de los controles fronterizos o de la seguridad nacional, que se oponen a grupos interesados en la apertura, la diversidad, la igualdad y la protección de derechos humanos de los migrantes. Es un choque de frente a toda velocidad. En estas fechas los líderes sociales del Congreso Nacional Latino de los Estados Unidos discuten cómo multiplicar su poder electoral para derrotar la ola política antiinmigrante. Por lo menos grupos de paisanos nuestros cuentan con poder electoral como arma negociadora. Pero son la excepción y tienen mecanismos limitados y conquistas lentas y focalizadas.

Millones más de clandestinos siguen recibiendo golpes, indefensos. La urgencia en la búsqueda de mecanismos de protección se acrecienta.

Aunque existe la condición soberana estatal y el derecho de cada uno de los países receptores de controlar sus fronteras y proteger la seguridad de sus ciudadanos, creemos que dichas actividades deben realizarse en un marco amplio de protección de los derechos humanos y con una política objetiva e integradora. Creemos que la ley es el mecanismo para conducir el complejo proceso. El punto de partida es continuar fortaleciendo la divulgación, la plena validez y la entera ejecución del marco legal internacional que protege los derechos de los migrantes. Todavía nos tocará ver mucho sobre el tema.

Sobre Clandestino basta decir que es un disco exquisito, es un himno, es un grito: “pa una ciudad del norte/ yo me fui a trabajar/ la vida la dejé/ entre Ceuta y Gibraltar/ soy una raya en el mar/ fantasma en la ciudad/ mi vida va prohibida/ dice la autoridad/ solo voy con mi pena/ sola va mi condena/ correr es mi destino/ por no llevar papel/ perdido en el corazón/ de la grande Babylon/ me dicen el clandestino/ yo soy el quiebra ley”. Los invito a escuchar esa poesía de la reconciliación, de la diversidad y del mundo.

ramoscobo@hotmail.com

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