No todas las personas son buenos candidatos para esta operación, el recubrimiento no es para pacientes con osteoporosis.
AP
WASHINGTON.- Los médicos en Estados Unidos han empezado a ofrecer una alternativa al reemplazo de cadera a la generación de la posguerra, cuyos miembros no tienen que esperar ya a cumplir 60 años para ser operados.
Estas personas, nacidas luego de la Segunda Guerra Mundial, son llamados "baby boomers" en Estados Unidos. Muchos de ellos, como el presidente George W. Bush y su predecesor Bill Clinton, apenas están llegando a la sexta década de su vida.
La alternativa al reemplazo se denomina "recubrimiento de cadera" y consiste en cubrir la cabeza del fémur y su articulación en la cadera con metal liso, en lugar de eliminar el hueso y remplazarlo con la prótesis.
La operación llegó al mercado estadounidense a inicios del año pasado, cuando la Administración Federal de Medicinas y Alimentos aprobó el Sistema de Recubrimiento de Cadera Birmingham, desarrollado en Gran Bretaña. Actualmente se realizan pruebas de otros sistemas, los cuales podrían ser aprobados por el organismo en el curso del año.
Esta no es la primera que los cirujanos ortopédicos han tratado de reparar caderas gastadas, pero hasta ahora no se había tenido éxito. Informes provenientes de Europa indican que este nuevo enfoque emplea materiales de mayor duración, lo cual permitiría a la articulación resistir los niveles de actividades de los cuarentones y cincuentones actuales mucho mejor que los reemplazos tradicionales.
"Muchas personas me comentan, 'mi padre tuvo un recubrimiento de cadera en 1970 y no funcionó. ¿Por qué lo estamos haciendo ahora?"', dijo el doctor Michael J. Anderson, cirujano ortopedista que estima que alrededor del 15% de los implantes de cadera que realiza son ahora recubrimientos.
Su respuesta es que comparar las técnicas actuales con las del pasado es como hacerlo entre un automóvil moderno y un Ford Modelo T.
No todas las personas son buenos candidatos para la operación, advierten los expertos. El recubrimiento no es para pacientes con osteoporosis, dado que parte de la articulación podría romperse, o quienes tiene problemas renales, que no eliminarían las partículas metálicas producidas por la fricción de las superficies en la articulación.
Además, aunque los pacientes se recuperan más rápidamente, el recubrimiento es más difícil que el remplazo de cadera, y solamente unos pocos cirujanos ortopédicos en Estados Unidos están capacitados para realizar la operación.
