El presidente colombiano Alvaro Uribe pronuncia un discurso tras reunirse con el profesor Gustavo Moncayo, hoy, en la plaza de Bolívar de Bogotá. (EFE)
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, anunció hoy que acepta una "zona de encuentro" provisional, por 90 días, para definir un acuerdo humanitario que derive en la libertad de los secuestrados por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"Si las FARC liberan a los secuestrados con la participación de la comunidad internacional, el gobierno acepta una zona de encuentro para pactar la paz en 90 días con las FARC", dijo Uribe en acto público en la Plaza de Bolívar de Bogotá.
El presidente añadió que "aquí hay firmeza pero no están cerradas las puertas de la paz".
Anunció también que "el gobierno está dispuesto a liberar guerrilleros si liberan secuestrados" y que "liberaría a los que están en Colombia", aunque "a todos no y con la condición que no se reincorporen al asesinato ni al secuestro".
Uribe hizo los anuncios al responder a preguntas de personas que asistieron a la Plaza de Bolívar para presenciar su encuentro con el profesor Gustavo Moncayo, que concluyó ayer en la capital colombiana una marcha por la liberación de un hijo suyo, el cabo del Ejército Pablo Emilio Moncayo, secuestrado hace casi diez años por las FARC, y de todos los cautivos de esa guerrilla.
El presidente, que compareció a la Plaza de Bolívar acompañado de sus ministros, fue interrumpido con silbidos de protesta por la multitud en algunos momentos de su intervención, ante lo cual invitó a quienes manifestaban su disconformidad a hacerlo en la tribuna y facilitó para ello el micrófono.
Moncayo, profesor de ciencias sociales, caminó más de 850 kilómetros durante 46 días, desde Sandoná, en el suroccidental departamento de Nariño, hasta Bogotá, centro del país, para buscar la firma de un acuerdo humanitario que conduzca a la libertad de su hijo y de los demás rehenes de las FARC.
En el grupo de 45 secuestrados que pueden ser canjeados por guerrilleros presos figuran la ex candidata presidencial Ingrid Betancurt, que también tiene nacionalidad francesa, así como otros políticos, militares, policías y tres estadounidenses.
Moncayo concluyó su travesía a pie el miércoles, cuando llegó a Bogotá y se instaló en una carpa en la Plaza de Bolívar, vecina a las sedes de los tres poderes del Estado, y anunció que permanecerá allí "hasta que se logre el acuerdo humanitario".