El Siglo de Durango
POANAS, DGO.- Combaten la plaga de la chinche de encaje en los árboles de membrillo de la microcuenca que comprende de La Villita de San Atenógenes a Narciso Mendoza, con la finalidad de que el mal se propague.
Carlos Arturo Solís Almunia, director de Desarrollo Rural de Poanas informó que se lleva a cabo un barrido en los árboles de membrillo para contrarrestar la plaga de la chinche de encaje que causa la pudrición del fruto.
Si se cuantifica la superficie de árboles de membrillo, son entre 60 y 70 hectáreas, en las que se hará una aplicación general del producto especial para erradicar la plaga que desde hace cuatro años se ha comenzado a manifestar el frutal.
Con esta labor se evitan los daños al producto cuyo nombre científico es de Cydonia oblonga, además de los otros frutos que se producen en Poanas como son: la ciruela, durazno, chabacano y manzano.
Dijo que se está a buen tiempo de combatir la plaga por lo que se espera que el membrillo siga generando buenas utilidades a los productores de la región como hasta ahora.
Además platicó que parte del membrillo de Poanas se va al bajío en donde se concentran fabricantes de cajeta, producto que ha dado fama a esa región de México.
Indicó que en Poanas aún no se explota la fruticultura al 100 por ciento, empero es sólo cuestión de tiempo para que los productores de la región se den cuenta de la rentabilidad de dicha actividad.
Por lo pronto, señaló que los trabajos de liberación de plagas se hacen en coordinación con el Comité Estatal de Sanidad Vegetal del Estado de Durango, órgano encargado de bajar recursos para el combate de plagas o enfermedades de las plantas.
Numeralia
70
hectáreas
de membrillo se concentran en la microcuenca
frutales
distintos hay en Poanas
