El campeón mundial contrarreloj Fabian Cancellara ganó el sábado el prólogo del Tour de Francia, que marcó el debut de la principal carrera ciclística del mundo en la capital británica. (Fotografía de AP)
El suizo Cancellara da la bienvenida al primer maillot amarillo.
El suizo Fabian Cancellara, campeón del mundo contrarreloj, del equipo danés CSC, tuvo el honor de estrenar el maillot amarillo del Tour 2007 al firmar una impecable victoria en el prólogo disputado en Londres con un monumental recorrido de 7.9 kilómetros, mientras que el primer español fue José Iván Gutiérrez, del Caisse D’Epargne, duodécimo a 33 segundos del ganador.
Cancellara, que ya ganó el prólogo del Tour en 2004 y sorprendió al mundo con su triunfo en la París Roubaix la pasada temporada, puso alas a su maillot ‘arcoiris’ y se presentó en meta con el único tiempo por debajo de los 9 minutos de los 189 participantes (8.50), con un vuelo rasante a 53.7 kms/hora, en una exhibición que regaló el ciclista suizo a una increíble multitud de un millón de personas que disfrutaron del ciclismo, pese a todo, en la capital londinense.
Kloden (Astana), que se presentó como artista invitado cuando nadie contaba con el, mantuvo la emoción hasta el final cuando marcó 9.03, pero cedió 13 segundos ante el obús suizo. La tercera plaza se la llevó el estadounidense George Hincapie (Discovery), a 23 segundos, y la cuarta para el gran favorito, el británico Bradley Wiggins (Cofidis), que se quedó sin la fiesta soñada ante sus compatriotas y vecinos.
El grupo de favoritos concluyó en una horquilla de diez segundos, diferencia insignificante en una jornada que no deja de ser de trámite y que sirve para quitarle el precinto al maillot amarillo.
Alexandre Vinokourov (Astana) firmó la séptima plaza a medio minuto de Cancellara y de la alta jerarquía fue el único que apareció en el top ten del prólogo.
El campeón de España de la especialidad, José Iván Gutiérrez fue duodécimo a 33 segundos, mismo tiempo que el británico David Millar (Saunier), la decepción de la jornada, también ante sus compatriotas, y que Mikel Astarloza (Euskaltel). Alberto Contador (Discovery), consumado escalador, obtuvo un meritorio decimoquinto lugar a 35 segundos.
Elm día de hoy se disputa la primera etapa entre Londres y Canterbury, de 203 kilómetros, la primera oportunidad para los esprinters, que encontrarán un perfil llano con cuatro ligeras ondulaciones de cuarta categoría que no entrañarán dificultad alguna.
Fiesta popular y sol londinense arropan el inicio del Tour
Un ambiente festivo y jovial entre el numeroso público, londinenses y turistas, arropó ayer el inicio del Tour de Francia en la capital británica, que recibió el prólogo de la ronda gala con un espléndido sol en contraste con el ambiente gris de los últimos días.
El recorrido de casi ocho kilómetros por el centro de Londres estuvo plagado de público que animó a los ciclistas en busca del primer maillot amarillo de la carrera que partió para tres semanas de pelea.
Los organizadores contaban con atraer hasta a tres millones de personas, una cifra difícil de calcular, puesto que será complicado saber cuántos de los asistentes acudieron a animar a los ciclistas y cuántos a visitar las bellezas de Londres.
“Pocas veces he visto tanta gente en una carrera ciclista”, aseguró el ex campeón de Francia Thomas Vockler, sorprendido como muchos de sus colegas por el éxito popular que tuvo la carrera en un país con poca tradición ciclista.
El comienzo de la prueba, muy cerca del popular Big Ben, fue seguido por mucho público, buena parte compuesto de turistas que visitaban la capital británica.
La operación fue un éxito en una jornada particular para Londres, que recordó los atentados terroristas que hace dos años se cobraron la vida de 56 personas.
Con la visita del Tour de Francia, el alcalde de Londres, Ken Livingston, se apuntó dos tantos: por un lado promocionó la bicicleta en una ciudad en la que no tiene un gran éxito y, por otro, dio el banderazo de salida a los eventos deportivos que desembocarán en los Juegos Olímpicos de 2012.
Particularmente aplaudido fue el corredor local Bradley Wiggins, el único londinense del pelotón, que recorría en la etapa los mismos lugares en los que aprendió a montar en bicicleta y que se ha hecho popular en su país por sus éxitos en pista y porque le han designado como embajador para el ciclismo de los Juegos de dentro de cinco años.
También pudo comprobar el cariño del público el escocés David Millar, otro especialista de la disciplina que ha contribuido a popularizar el deporte en las islas. Completaron la lista de británicos Charles Wegelius, Mark Cavendish y Thomas Geraint.
Londres salvó con este éxito popular la inquietud que se había generado en torno al seguimiento que tendría el prólogo del Tour de Francia en una tierra donde el deporte de las dos ruedas no tiene una gran tradición y en un fin de semana en el que afrontaba la competencia de Wimbledon y del Gran Premio de Fórmula Uno de Silverstone.