Subsecretaría de Educación exhorta a directora de la tarde a habilitar salón sobrante como centro de cómputo
TORREÓN, COAH.- En el mismo lugar, es decir, arrumbadas en el cuarto de intendencia, permanecen las 15 computadoras del turno vespertino de la primaria Agustín Melgar. La Sociedad de Padres de Familia está indignada porque sus hijos no reciben clases de computación, mientras que los alumnos de la mañana hasta maestros de inglés tienen.
Pero la Subsecretaría de Educación y Cultura en La Laguna aseguró que la versión de las madres de familia del turno vespertino de la primaria Agustín Melgar, es inexacta y exhortó a la directora, Eunice Ordaz Luna, a usar uno de los salones que sobran en la tarde aunque esto implique instalar y quitar todos los días las computadoras.
Ignacia Fuentes, presidenta de la Sociedad de Padres de Familia, dijo que Ismael Rentería Medina, director del turno matutino, no sólo dispuso de manera arbitraria de un salón que se construyó con el fin de habilitarlo como centro de cómputo para el turno de la tarde, sino que en enero de 2007, sin avisar siquiera, mandó derribar un cuarto de abobe que servía como biblioteca para sus hijos.
Por eso, ahora los libros de texto gratuito están en unas cajas semideshechas y a la intemperie, algunos ya deshojados. Ignacia Fuentes aseguró que el director del turno vespertino tampoco permite que los alumnos de la tarde usen algunos salones que tienen aparatos de refrigeración.
De acuerdo a la madre de familia, el año pasado la dirección del turno vespertino derribó unos sanitarios inservibles y solicitó a la Secretaría de Educación y Cultura convertir el espacio en el nuevo salón de cómputo, pues esta dependencia derribó siete salones porque estaban en malas condiciones.
“Uno de esos salones era el centro de cómputo de nuestros hijos, por eso decidimos tirar los baños viejos y cuando desde Saltillo mandaron gente para construir un salón, la dirección vespertina tomó la decisión de acondicionarlo para instalar ahí las computadoras, pero el profesor Rentería Medina, en un acto de arbitrariedad e influyentismo, dispuso del lugar sin pedir opinión de nadie, por eso ahora las 15 computadoras están arrumbadas en el cuarto de intendencia”.
Por su parte, Jesús Rentería Medina, subsecretario de Educación y Cultura, aclaró: “En esa escuela se derrumbaron siete aulas, de las cuales se construyeron cuatro y están pendientes tres. El centro de cómputo estaba en uno de esos espacios, y no es el director del turno matutino el que toma esas decisiones porque hay una dirección de Infraestructura de la Secretaría de Educación y Cultura, la que realiza a través de peritajes la demolición de aulas”.
Insistió en que las madres de familia tienen una versión equivocada, “a la directora se le ha dado la opción de que use uno de los salones y lo acondicione para instalar las computadoras, puede dividir un aula con alguna pared de tablarroca de manera temporal”.
Jesús Rentería señaló que dio instrucciones a la jefatura y supervisón de zona escolar, para que le hagan entender a la directora que es su responsabilidad acondicionar el centro de cómputo porque cuenta con los recursos económicos para esta acción.
“En la mañana son tres secciones por grado, en la tarde tienen once grupos, y la directora dice que sobran salones, pero eso es en su turno porque en la mañana no. Hay tres aulas que son muy amplias, creo que son de diez por seis metros cuadrados, y el director (Ismael Rentería Medina) le ofreció que hiciera la división con tablarroca y que acondicionara el centro de cómputo, pero ella no pone nada de su parte, ella quiere que nosotros le resolvamos el problema pero no podemos hacerlo”.
Sobre la queja de las madres de familia de que a los alumnos de la tarde no se les permite usar los salones que tienen aire acondicionado, el funcionario dijo que esto sucede porque la directora no quiso cooperar nada de dinero cuando se hizo la compra de los aparatos.
