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DAVOS, SUIZA.- El Foro Económico Mundial de Davos cerró ayer con un legado de promesas, esperanzas y buenas intenciones para abatir retos globales en materia de libre comercio, cambio climático y Oriente Medio.
Durante cinco días, líderes políticos y del sector privado de todo el mundo acudieron a la cita anual en este poblado de los Alpes suizos para tratar de identificar soluciones a problemas mundiales y diseñar estrategias para atenderlos.
?Creo que la cita de este año ha sido muy productiva, con una amplia variedad de asuntos discutidos?, dijo el fundador del foro, Klaus Schwab, al final del último de los más de 200 paneles del programa de esta edición.
Los líderes de la política comercial de países clave en el debate sobre liberalización de bienes y servicios se reunieron aquí, por primera vez en más de seis meses, para tratar de revivir la llamada ronda de Doha. Las negociaciones comerciales para agilizar y ampliar el intercambio mundial de bienes y servicios se mantienen congeladas por la negativa de países europeos y Estados Unidos a reducir subsidios a sus agricultores.
?Estoy confiado en que hay una nueva atmósfera para reanudar? el proceso de manera integral en Ginebra, dijo el secretario general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Pascal Lamy, tras la reunión ministerial.
Analistas se mantienen escépticos sobre las posibilidades reales de un progreso definitivo en el corto plazo, aunque dos de las posiciones más radicales, la de Estados Unidos y la de naciones en desarrollo, asoman promisorias.
?Hace un año estábamos exactamente en el mismo punto, en el mismo día? , dijo un asesor del gobierno francés que habló a reserva de no ser citado por nombre.
La pregunta ahora es, agregó, ?si podremos movernos con la agilidad y el compromiso suficientes para evitar otro impasse indefinido? .
El economista Joseph Stieglitz advirtió que la ausencia de avances en la agenda comercial global podría impactar el desarrollo económico de países ricos y pobres.
?Es una cuestión medular, pues como hemos visto aquí estos días, hay mucha presión para que los países en desarrollo hagan más para impulsar sus economías sin descuidar el medio ambiente?, dijo.
?No se les puede pedir a estas naciones que abran sus mercados sin nada a cambio y que recorten sus emisiones tóxicas sin la ayuda (financiera) internacional correspondiente? , dijo el académico de la Universidad de Columbia.
Las emisiones tóxicas estuvieron al tope de la agenda del Foro de Davos los primeros días, y tanto líderes políticos como empresariales se comprometieron a promover programas ambientales que eviten mayor deterioro de la atmósfera.
Lo que faltó fueron compromisos específicos de asistencia tecnológica y financiera, pública o privada a naciones en desarrollo, para ayudarles a abatir el reto.
En materia política, el tema que más atención atrajo fue el Medio Oriente, con Irak por un lado y el diálogo de paz entre israelíes y palestinos, por el otro.
El foro sirvió de escenario para que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, y la canciller israelí Tzipi Livni, se reunieran en privado y acordaran reactivar el diálogo de paz.
Estados Unidos, la Organización de Naciones Unidas (ONU) , Rusia y la Unión Europea, el llamado cuarteto para Medio Oriente, auspiciarán el mes próximo la reactivación del diálogo.
El Foro dedicó también un par de sesiones a América Latina, con la presencia de los presidentes de las dos naciones más influyentes del área, Brasil y México, presentando sus visiones sobre el futuro de la región.
El presidente brasileño Luiz Inácio ?Lula? da Silva enfatizó su visión de una Comunidad de Naciones de Sudamérica, mientras el mandatario mexicano Felipe Calderón expuso una perspectiva continental, con el comercio y el desarrollo como ejes del proceso.
El foro estuvo desprovisto este año de la presencia de grandes celebridades del mundo del entretenimiento, en un intento por regresar a sus orígenes, diálogo abierto entre gobernantes y empresarios de todo el mundo, la agenda del evento.
