Según los resultados de la encuesta ordenada por la Cámara Baja en el centro del país donde menos se confía en los legisladores, al obtener el 4.2 de promedio. (Archivo)
Según una encuesta ordenada por el propio cuerpo legislativo los diputados de todas las fracciones no pasaron la prueba de confianza de la sociedad.
La Cámara de Diputados confirmó algo que ya sabía: que sus legisladores tienen una mala imagen y que su trabajo es reprobado por el grueso de la ciudadanía, por “no hacer nada” y cobrar “altos salarios”.
De acuerdo con los resultados de una encuesta ordenada por el propio cuerpo legislativo y aplicada en distintas regiones del país, los diputados de todas las fracciones políticas no pasaron la prueba de confianza de la sociedad, que les concedió como máximo una calificación de 5.6 en promedio, en un rango de 1 a 10.
El sondeo fue ordenado por la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados en la gestión de Jorge Zermeño (PAN), quien hace unos días fue ratificado como embajador de México en España.
Entre lo que más se recuerda de los diputados que integran la 60 Legislatura, según los resultados de la encuesta, es el enfrentamiento físico y verbal que se dio en la ceremonia de toma de posesión del presidente Felipe Calderón el primera de diciembre de 2006; que los diputados “no hacen nada”, y que a pesar de ello cobran “altos sueldos”.
La encuesta realizada por la empresa Berumen, forma parte del “Estudio sobre la honorable Cámara de Diputados”, con fecha de mayo de 2007, que incluye mil 500 entrevistas aplicadas del 5 al 14 de mayo, en diferentes regiones del país, y tiene una precisión de (+-) 3% con un nivel de confianza de 95%.
“A pesar que la población concede gran importancia al Poder Legislativo, no hay confianza entre los mexicanos hacia los diputados federales, al concederles 5 de calificación en este aspecto”, dice el apartado de conclusiones denominado “Principales hallazgos”.
La Ley más recordada por la ciudadanía que respondió al sondeo es la despenalización del aborto, aunque fue la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) la que dio su aval, seguida de la Ley del ISSSTE.
El documento revela que es en el centro del país donde menos se confía en los legisladores, al obtener el 4.2 de promedio.
Y en lo particular, los partidos también resultaron reprobados.
El Partido Acción Nacional (PAN) obtuvo un 5.6 de promedio; el Partido Revolucionario Institucional (PRI), 5.5 y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), 5.0. La fracción parlamentaria que obtuvo la calificación más baja fue la de Convergencia.
En cuanto al tema de la confianza los diputados de cada partido reprobaron, ya que nadie alcanzó el 6 de calificación; el PAN tuvo 5.5; el PRI, 5.4 y el PRD, 5.0; Verde Ecologista de México, 4.8; PT, 4.9; Convergencia, 4.0; Nueva Alianza, 4.7 y el Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina (PASC), 4.2 de calificación.
En materia de partidos políticos, el PAN y el PRI son los que mayor número de simpatizantes tienen en el país, mientras que el PRD se sitúa en tercer lugar, según el texto.
Además, se destaca que cuatro de cada diez mexicanos no simpatizan con algún partido político.
A la pregunta “¿Con cuál partido político simpatiza usted más?”, el ganador fue el PRI, con 22.5 % seguido del PAN, con 21.2% y del PRD con 13.5 %.
Por región, el estudio refleja que el PAN tiene mayor número de simpatizantes en el norte y el Bajío Occidente, el PRI en el Sureste, el PRD en el Centro. En la región noreste están equilibradas las fuerzas entre el PAN y el PRI.
Zermeño a escrutinio
En el estudio se dedicó un apartado especial para el ex presidente de la Cámara Baja, Jorge Zermeño, a quien se le identifica más que a los coordinadores parlamentarios y que dos de cada 10 lo reconocen y saben que pertenece al PAN.
Al preguntar sobre quién era el presidente de la Cámara Baja, sólo 6.6% señaló a Zermeño y 93.4% dijo no saber. Al mostrar una foto a los encuestados del panista, un 85.9% dijo no conocerlo y sólo un 14.1% lo reconoció.
De los que lo reconocieron, 49.3% dijo tener una opinión “regular”; 33.6% una “buena” opinión y el 9% una “mala” opinión; 6.2 % dijo tener una “muy buena” opinión y 1.9 % una muy mala.
Los consultados calificaron a Zermeño con 6.8 en capacidad en promedio; 6.9 en experiencia; 6.6 en habilidad para lograr acuerdos con otros partidos y 6.8 en desempeño al frente de la Cámara Baja.
En otro rubro, el documento revela que los coordinadores de las fracciones parlamentarias son “muy poco conocidos por la población”.
El más identificado de los ocho partidos es Emilio Gamboa (PRI), seguido de Héctor Larios (PAN), Javier González Garza (PRD), y Ricardo Cantú, del Partido del Trabajo (PT).
Pero en lo general, los legisladores de todos los partidos no pasaron la prueba de la confianza y fueron reprobados por la población.