El Santuario rendirá tributo a la Virgen de Fátima en Portugal, y contará con nueve mil asientos, tres capillas, 44 confesionarios, y un Cristo de siete metros de altura.
La nueva Iglesia de la Santísima Trinidad del Santuario de Fátima será inaugurada durante el cierre de las conmemoraciones del 90 aniversario de la aparición en octubre próximo.
El coste final del proyecto será de 60 millones de euros, 15 millones más de lo previsto, y se pagará con ingresos propios del santuario, que se prepara para recibir a cientos de miles de peregrinos para conmemorar el 90 aniversario de la primera aparición de la Virgen de Fátima a los tres niños pastores.
La nueva iglesia contará con una nave central con una capacidad de nueve mil asientos, tres capillas para 300 personas y 44 confesionarios, lo que supone la mayor obra de construcción de este tipo realizada en Portugal, según el director técnico de los trabajos, Antonio Carvalho.
El altar mayor tendrá una piedra retirada del túmulo de San Pedro regalada por el Vaticano y dos imágenes, una de la Virgen de Fátima y otra de Jesucristo crucificado, de siete metros de altura.
Guerra explicó que el santuario analizó la posibilidad de trasladar las tumbas de los tres videntes de Fátima a la nueva iglesia, pero que finalmente decidieron dejarlas en la basílica.
El prestigioso arquitecto luso Álvaro Siza Vieria diseñó para el interior del templo dos grandes paneles alusivos a los apóstoles San Pedro y San Pablo, mientras que para el exterior creó una obra con referencias a textos bíblicos en 23 idiomas.
La devoción por Fátima nació el 13 de mayo de 1917, cuando en el descampado conocido como Cova da Iria, a 141 kilómetros de Lisboa, los hermanos Francisco y Jacinta Marto y su prima Lucía afirmaron que se les apareció la Virgen, que les desveló los tres famosos secretos de Fátima.
El primer secreto vaticinaba la muerte prematura de Jacinta y Francisco y el segundo se refería al final de la Primera Guerra Mundial, el estallido de la Segunda y predecía la conversión de Rusia y el fin del comunismo.
El tercer mensaje de la Virgen se refería al atentado que sufrió Juan Pablo II en la Plaza de San Pedro otro 13 de mayo, el de 1988.
