La construcción de presas produce metano, uno de los gases que causa el efecto invernadero y que provoca el calentamiento global del planeta.
Denuncian que la construcción de El Tigre costó tres veces más de lo que se había presupuestado inicialmente
El Siglo de Durango
La construcción de la Presa El Tigre, que se acaba de inaugurar, así como la que se pretende empezar, llamada El Cañón de la Cabeza, entre los municipios de Simón Bolívar y Torreón, Coahuila, contribuirán a la generación de metano, un gas que produce efecto invernadero, junto con todas las que hay en el mundo y que están provocando el calentamiento global del planeta.
Francisco Valdez Perezgasga, presidente de Pro defensa del Nazas, así como investigador del Instituto Tecnológico de La Laguna, fue uno de los participantes en el foro de discusión “Perspectivas de Durango ante el cambio climático”, quien aseguró que la producción de gas metano fue resultado de un estudio que realizó Ivan Lima, y colaboradores y que se publicó el 9 de mayo, a través del Instituto Nacional de Investigaciones del Espacio de Brasil.
La investigación indica que las presas contribuyen a la emisión de gas metano en un 4 por ciento en el mundo, que es uno de los gases que tienen un efecto invernadero y del que se presume que contribuye al calentamiento global de la Tierra; sin embargo, es considerado, incluso más peligroso que el bióxido de carbono.
El investigador, así como otros más como María Elena Pérez López, del Centro Interdisciplinario de Investigación para le Desarrollo Integral Regional del Instituto Politécnico Nacional (CIIDIR-IPN), manifestaron que la construcción de las presas ha sido un error del ser humano, ya que además de la producción de metano, también obstruye la natural circulación del agua a través de ríos y arroyos.
La investigadora señaló que ahora la construcción de presas obedece más bien a los intereses económicos y hasta políticos de las sociedades. En su caso Francisco Valdez indicó que una investigación sueca expresa que la construcción de las presas obedece a lo que los gobiernos quieren, pero no a las necesidades de la naturaleza.
Francisco Valdez incluso añadió que la construcción de la Presa El Tigre no obedeció ni siquiera a un proyecto del Gobierno Estatal ni Federal, sino a los intereses del empresario Carlos Delgado y el ex diputado federal Ulises Adame, quienes fueron los que impulsaron el propósito.
Añadió que incluso en forma exorbitante, el proyecto de la construcción de la Presa El Tigre finalmente costó tres veces más de lo que se había presupuestado en el 2003. “Durante el 2003 según el proyecto original fue de 42 millones de pesos, de acuerdo a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP); posteriormente hacia el 2004 para cuando se presentó la manifestación de impacto ambiental la cifra se incrementó inexplicablemente a 60, en septiembre del 2004 estaba entre 70 y 80 millones de pesos, y no se había colocado ninguna piedra”, dijo.
Y añadió: “Ahora que se inauguró el costo fue de 94 millones de pesos, pero aún faltan detalles que terminarán en una cifra de 122”, señaló, de lo que incluso recalcó que no hay otro proyecto ambiental que haya sufrido un crecimiento tan espectacular.
Los investigadores expresaron que no se pueden estar construyendo presas porque sí, puesto que son acciones que impiden el paso natural del agua y que está afectando a los ecosistemas, en el sentido de que desaparecen variedades de fauna y flora que también provocan daños ecológicos.
Efectos
Otras afectaciones por la construcción de las presas
· A causa del miedo a los periodos de estiaje y sequía, los administradores de las presas no sueltan suficiente agua y los ecosistemas se dañarán.
· Hay algunos ríos y arroyos que ya no tienen agua o que están prácticamente secos.
· Producen que el ganado también tenga problemas al tratar de buscar fuentes de abastecimiento del vital líquido, pues no hay en los ríos y arroyos como antes se solía mantener.
· Hay cambio en los ecosistemas, como por ejemplo la desaparición de insectos o la proliferación de éstos.
Fuente: Foro de discusión “Perspectivas de Durango ante el cambio climático”.
