A finales de 2005 la región “había multiplicado por 6.7 el número de abonados a Internet de banda ancha que tenía en 2001, hasta alcanzar los 8.83 millones”. (Archivo)
MÉXICO, DF.- El mercado de la banda ancha en América Latina crece cada año 85 por ciento, lo cual garantiza un "notable potencial de incremento en los próximos años", refiere el estudio DigiWorld América Latina 2007.
De acuerdo con el trabajo presentado por Fundación Telefónica en Madrid, España, a finales de 2005 la región "había multiplicado por 6.7 el número de abonados a Internet de banda ancha que tenía en 2001, hasta alcanzar los 8.83 millones".
El análisis regional, que se realiza sobre la evolución de la Sociedad de la Información y los niveles de adopción de las nuevas tecnologías, expone que de ellos 74 por ciento utilizaba ADSL, una tecnología de acceso que permite a los hilos telefónicos de cobre convencionales una alta velocidad de transmisión.
“La evolución de la banda ancha durante el último año (2006) y el primer trimestre de 2007, consolidan a Telefónica como el primer proveedor de BA a través de ADSL en la región, con más de cuatro millones de clientes ADSL a finales de marzo pasado".
El estudio destaca el desarrollo experimentado por la banda ancha, pero aclara que "todavía presenta niveles de penetración bajos; sólo Chile tenía en 2005 una penetración superior a tres por ciento".
Una media de 17 por ciento de la población de las principales economías de la región -que alcanza niveles superiores a 37 por ciento y 26 por ciento en países como Chile y Argentina, en ese orden- son usuarios de Internet.
Lo anterior, puntualiza, gracias al éxito del modelo de acceso compartido (una conexión puede permitir el acceso a muchos más que a un único abonado), lo cual resulta significativo si se toma en cuenta que a finales de 2005 sólo 12.2 por ciento de los habitantes de la región tenía acceso propio a una computadora.
Sobre el perfil de los usuarios, el estudio destaca un aumento en la penetración de Internet en todos los niveles socioeconómicos y en las franjas de edad, tanto más jóvenes como entre los mayores.
La tercera revolución industrial
El mundo se encuentra al alba de la tercera revolución industrial que creará una economía post-petróleo y post-nuclear, capaz de gestionar y mitigar los efectos del cambio climático, aseguró aquí el experto estadounidense Jeremy Rifkin.
En una conferencia titulada "La economía del hidrógeno. Hacia una nueva era energética y la tercera revolución industrial", celebrada en la Cámara de diputados italiana, Rifkin destacó que el planeta se acerca al final de la era del petróleo.
"Tras la gran revolución de los años noventa, en los que Internet, las computadoras, el World Wide Web han conectado el sistema nervioso central de más de mil millones personas de la Tierra a la velocidad de la luz, está naciendo una nueva convergencia entre energías renovables y sistemas de comunicación", dijo.
Señaló que la creación de un régimen de energía renovable, con tecnología de células de combustible al hidrógeno y parrillas de energía inteligente, abre la puerta a la tercera revolución industrial y debería tener un potente efecto de multiplicador electrónico en el siglo XXI.
Ello similar al efecto de la tecnología del carbón y del vapor en el siglo XIX y el petróleo y el motor de combustión interna en el XX.
Dijo que con la nueva tecnología, cada casa, cada fábrica, cada oficina tendría su célula energética autónoma al hidrógeno.
