EL UNIVERSAL
MÉXICO, D.F.- Las temperaturas de más de 50 grados centígrados en la India, las inundaciones de dos metros en Brasil, el peligro de extinción de cientos de especies animales -entre ellas el oso polar-, el derretimiento de las nieves "eternas" del Kilimanjaro y la aparición de violentos huracanes como "Katrina" o "Wilma", tienen una causa común: el incremento de medio grado centígrado en la temperatura promedio de la Tierra en el último siglo, producto del cambio climático.
Aunque el aumento de medio grado centígrado es imperceptible para una persona, esa elevación climática resulta muy peligrosa para el frágil equilibrio ecológico de nuestro planeta y amenaza con crear mayores estragos en lo sucesivo, pues sólo basta recordar que seis de los siete años más calurosos de los que se tengan registro alguno han ocurrido a lo largo de la última década.
La gran quema de combustibles fósiles como el petróleo, gas y carbón provoca que las moléculas de carbono (C) de esos energéticos, se combinen con el oxígeno (O2), creando así dióxido de carbono (CO2), uno de los principales gases responsables del cambio climático en la Tierra.
Los rayos solares que llegan al planeta son absorbidos en parte por la superficie de la Tierra, pero un porcentaje de ellos es reflejado; pero, al acumularse el CO2, ese gas, junto con el metano, impide que la energía del Sol salga al espacio, produciéndose así el sobrecalentamiento.
Gran costo
Muchos de los desastres climáticos de los últimos tiempos están directamente ligados con el calentamiento global; no obstante, sus secuelas no sólo son apreciables a nivel ecológico, sino político, social y económico.
Un reciente estudio realizado por científicos, y encabezado por el ex jefe del Banco Mundial, Nicholas Stern, a solicitud del gobierno británico -que evaluaba el impacto económico y ambiental-, reveló que el calentamiento global puede costarle al mundo mucho más que las guerras mundiales y desatar una crisis económica de dimensiones similares a la Gran Depresión de 1929.
Si se adoptaran medidas inmediatas, el costo sería de 1% del Producto Interno Bruto Mundial, explica Carlos Gay, director de Centro de las Atmósfera de la UNAM; pero si no se hace nada, el costo hacia mediados de siglo ascenderá a 5% PIB mundial, por lo que se deben tomar medidas urgentes.
La "adicción al petróleo de la actual sociedad mundial", como calificó el famoso astrónomo Carl Sagan al uso intensivo de combustibles fósiles, ya comienza a presentar estragos diversos, según especialistas.
"El cambio climático no es sólo un tema de medio ambiente, como muchos creen. Destrozará cosechas, pondrá en peligro a las poblaciones costeras, destruirá ecosistemas, extenderá enfermedades como la malaria y la fiebre amarilla y aumentará los conflictos para lograr recursos", opinó en noviembre pasado, durante la evaluación del Protocolo de Kioto, el entonces secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan.
En la cinta La verdad incómoda, el ex vicepresidente de Estados Unidos, Al Gore, alerta que el fuerte calor ya ha producido la muerte de unas 35 mil personas en Europa y la desaparición de 40% del espesor de los hielos del Ártico, además de la aparición de 30 nuevas enfermedades relacionadas con el desplazamiento de plagas. En la última década, alrededor de 10 mil estudios acerca del cambio climático han sido publicados. En la mayoría de ellos se prevé un incremento gradual de la temperatura mundial en las próximas décadas.
No hay que olvidar que el planeta, a lo largo de sus poco más de 4 mil millones de años de historia, ha presentado periodos de glaciación y de calentamiento de manera natural.
Humanos, poco responsables
Para Juan Antonio García Oviedo, catedrático de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), la mayoría de las versiones acerca del cambio climático son un tanto alarmistas, dado que la participación humana y las emisiones de dióxido de carbono (CO2) sólo aceleran un poco ese incremento de temperatura, dentro de un proceso natural que será totalmente reversible.
El investigador dice que, hasta el momento, no se han presentado suficientes pruebas científicas que validen que es la actividad humana la causante de ese calentamiento global, pues ese mayor efecto invernadero y, por ende, mayor temperatura de la superficie terrestre, se ha dado también en el pasado histórico de este mundo, donde también se han derretido los polos.
Sin embargo, consideró positivas las medidas tomadas durante los últimos años para disminuir los gases de efecto invernadero en diversos países, así como buscar nuevas fuentes de energía diferentes a los combustibles fósiles.
El investigador de la UNAM, Carlos Gay García, asegura que si bien algunos "estudios" han señalado que los humanos son poco responsables del calentamiento que experimenta la Tierra, se ha descubierto que algunas de esas "investigaciones" han sido influenciadas por empresas petroleras como Exxon.
Más calor
Aunque algunos reconocidos científicos como el Nobel de Química 1995, el mexicano Mario Molina, señalan que la temperatura promedio de la Tierra subirá en unos tres grados al final de presente siglo, en los diversos estudios los diferentes grupos de investigación no se ponen de acuerdo en qué tan acelerado podría ser este proceso de incremento de temperatura.
Desde el punto de vista de Jorge Zavala Hidalgo, científico del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, hay diversas variables a tomar en cuenta en lo que respecta al calentamiento global, como el hecho de que "una mayor cantidad de vapor de agua provoca la formación de más nubes, las cuales pueden convertirse en un escudo que refleje los rayos solares y, de esa manera, aminorar el incremento de calor en el mundo".
Otro argumento científico apunta a que los hielos de los polos, además de mantener una temperatura más baja en el planeta, son una especie de espejo que refleja -casi en su totalidad- los rayos solares, por ello, en caso de derretirse, la superficie que antes ocupaban esos hielos absorberá más calor y, por ende, calentará más el planeta.
Acuerdos
Un acuerdo internacional, el Protocolo de Kioto, compromete a los países industrializados a cumplir metas específicas para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
El protocolo sufrió un gran golpe cuando Estados Unidos, responsable por una cuarta parte de las emisiones globales, lo abandonó en 2001. Sin embargo, en 2004, Rusia decidió ratificarlo, lo que posibilitó que se convirtiera en realidad.
Aunque muchos países ya han tomado medidas para reducir sus emisiones, se cree que las metas del Protocolo de Kioto no son más que una fracción de las reducciones necesarias para frenar, de forma significativa, el calentamiento global El protocolo sigue generando acalorados debates. Hay quienes consideran que su fracaso significaría una catástrofe global, mientras que otros plantean que es demasiado débil, inoperante o incluso innecesario.
Suscrito en la ciudad japonesa del mismo nombre, tiene el objetivo de que los países industrializado y, posteriormente, los del Tercer Mundo, disminuyan de manera gradual sus emisiones de gases para frenar el efecto invernadero.
Pero, pese a que la gran mayoría de los participantes está de acuerdo con este reglamento, dos de los más grandes productores de CO2 en el mundo, Estados Unidos y Australia (que de manera conjunta contribuyen con 40% de las emisiones totales de ese gas contaminante), se han abstenido de firmar el documento.
Frente a esa situación, científicos de todo el mundo, entre ellos Mario Molina, políticos como Al Gore y muchos otros personajes, han realizado diversos llamados para que la gente se sume, de manera individual, para detener el calentamiento global y, al mismo tiempo, presionar a sus políticos para tomar las medidas necesarias para revertir el incremento de la temperatura en el planeta.
"Nos complicará la vida"
MÉXICO, D.F.- El cambio climático en la Tierra no ocasionará la extinción de la especie humana "pero sí nos puede complicar mucho la vida", dijo el director del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, Carlos Gay García, en un chat con usuarios.
El doctor en Astrogeofísica por la Universidad de Boulder, Colorado, explicó que de aumentar el calentamiento, se incrementarán las enfermedades transmitidas por el piquete de mosquitos, como la malaria y el dengue, dado que serán abundantes los lugares con condiciones de temperatura y lluvia favorables para esas especies. Otras enfermedades que podrían incrementarse serían las gastrointestinales generadas por la falta de agua e inundaciones, así como males relacionados con ondas de calor.
Los internautas manifestaron su preocupación ante el fenómeno que en la última década ha provocado temperaturas superiores a los 50 grados centígrados en algunos países, inundaciones, huracanes devastadores y el peligro de extinción de varias especies animales.
El especialista enfatizó en sus respuestas que aunque el cambio climático no es fenómeno que se pueda revertir, es posible aminorar su impacto a través de la reducción de gases de efecto invernadero a la atmósfera como es el caso del dióxido de carbono que se produce por quema de combustibles fósiles. Dijo que estas reducciones "tendrán que ser muy drásticas, del orden del 50% o 60%".
Acerca de lo que cada persona puede hacer, dio como ejemplos reducir la quema de combustibles fósiles que varios países se niegan a hacer, ahorrar energía eléctrica, y reducir la cantidad de basura, el uso del auto y de los recursos naturales.
