Cuidados para un lindo cuello
El cuello es una pieza clave de la arquitectura corporal.
De él dependen, en buena medida, la gracia y la elegancia. Sin embargo, esta área queda muy a menudo excluida de los cuidados cotidianos a pesar de que es ahí -y en el escote- donde más se nota la edad.
La piel del cuello es muy vulnerable porque no posee un buen sostén muscular y tiene pocas glándulas sebáceas. Por ello, el debilitamiento del tejido graso hace que se relaje y dé lugar al super temido doble mentón.
Es tan fina y delgada, que su fragilidad se manifiesta igualmente con la pérdida temprana de humedad, del rompimiento de las fibras elásticas y la alteración de la microcirculación. Todo ello provoca que aparezcan las arrugas en forma de collar, conocidas como "anillos de Venus", así como el colgamiento del contorno facial. Asimismo, en el escote aparecen las clásicas manchas oscuras causadas por el envejecimiento cutáneo debido a la acción del sol.
¿Qué hacer?
Cuidar esta delicada área implica brindarle los mismos mimos que se tienen con el rostro: Lavar dos veces al día, exfoliar una vez por semana y usar cremas específicas.
La correcta aplicación de cremas es mediante movimientos circulares suaves y ascendentes, o sea, un masaje del cuello a la barbilla.
Para que la zona se mantenga tersa pero firme, se recomienda una ducha con agua fría.
Ejercicios sencillos
La masa muscular que aquí existe es muy poca por lo que no se puede desarrollar ni fortificar fácilmente. Sin embargo, sí se pueden hacer algunos ejercicios que retrasen un poco los signos de envejecimiento.
1) Apoyar los brazos sobre la mesa. Juntar las muñecas y abrir las manos en forma de copa. Colocar la barbilla dejando caer el peso de la cabeza, presionar varias veces.
2) Inclinar la cabeza lentamente hacia adelante intentando tocar con la barbilla el cuello; luego, echar la cabeza lentamente hacia atrás lo más que se pueda. Hacer al menos una serie de cinco movimientos al día.
3) Con la espalda recta, realizar lentamente giros completos de cabeza. Relajar, hacer cinco giros y parar. Hacerlo por lo menos una vez el día.
Recomendaciones cosméticas
a) Tratamiento de efecto remodelador para el rostro y cuello en loción, de Ebel. Inspirado en la técnica de los hilos rusos. Su innovadora tecnología tiene efecto "malla", que ayuda a regresar el óvalo facial y el cuello a su forma original.
b) Crema Hidratante para Rostro y Cuello, de La Mer. Gracias a su fórmula con extracto de algas devuelve la juventud al rostro y cuello. Para óptimos resultados se debe calentar una pequeña cantidad de producto entre las yemas de los dedos y después aplicar suavemente.
c) Crema para cuello y escote de la línea Skin Activator, de Herbalife. De fórmula no grasosa y de rápida absorción, diseñada para ayudar a reducir la aparición de finas líneas y arrugas al tiempo que suaviza la piel. Se aplica por la mañana y noche.
