El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Colectores reparados con tubería usada, bitácoras donde se reportan trabajos más caros a los realizados, así como la triangulación de obras y subcontrataciones a familiares de ex funcionarios del Simas, serán algunas de las líneas de investigación a seguir en la auditoría externa que se le practicará a la paramunicipal. Esta semana el Congreso del Estado decidirá cuál empresa hará la ?tercería? y entonces se le notificará a la empresa abastecedora de agua.
Al respecto, Alberto Díaz de León, gerente del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) de Torreón, expresó que no hay nada qué ocultar y admitió que para la reparación de colectores se compra la totalidad de los tubos y sólo licita la mano de obra de las empresas que deseen participar. No obstante, aseguró: ?nosotros no compramos material de mala calidad?.
Por su parte, el alcalde José Ángel Pérez declaró que hasta ahora no se ha recibido notificación de la auditoría externa, pero, dijo, ?nosotros estamos listos para que se realicen estos trabajos, no nos oponemos, sin embargo, veremos que no se viole la autonomía municipal?.
Anunció que se estudia la posibilidad de interponer un juicio de controversia constitucional, ya que se trata de un asunto en el cual el Simas ha sido revisado por lo menos tres veces por la Contaduría Mayor de Hacienda y en su momento se solventaron las observaciones. Además, comentó que el Simas es revisado por despachos externos y tiene su propia Contraloría.
El diputado local priista Miguel Riquelme Solís, quien junto con Demetrio Zúñiga y Román Alberto Cepeda presentaron un punto de acuerdo ante el Congreso local para la revisión de las cuentas públicas del Simas de todo el ejercicio de 2004 y los primeros tres trimestres de 2005, dijo que esta investigación externa permitirá ahondar en los ?negocios oscuros que se realizaron en el Simas cuando fue presidente municipal Guillermo Anaya quien, en su ejercicio, gozó de la protección del titular de la Contaduría Mayor de Hacienda, Ricardo Álvarez Díaz, que incluso lo apoyó con la asesoría de empresas externas?.
Otra línea de investigación que se pedirá es para conocer el origen-destino de los recursos solicitados en el fideicomiso de la planta tratadora y que en realidad sirvieron para respaldar el gasto corriente de la obra y su posterior mantenimiento. ?Otra muestra del gran desvío de recursos es que actualmente no funciona la línea morada para la que se pidió el crédito por 10 millones de pesos?, según Riquelme Solís.
La semana pasada, Ricardo Álvarez declaró en Saltillo que no consideraba importante una nueva investigación a los citados ejercicios fiscales de la paramunicipal en virtud de que ya se habían realizado tres revisiones ex profeso.
Para Riquelme Solís, resulta lamentable la postura de Ricardo Álvarez, ya que, dijo, ?no es su papel cuestionar las decisiones del Congreso ni de la Comisión de Hacienda, sino cumplir su trabajo como órgano técnico fiscalizador del Congreso del Estado. Lo mejor es que renuncie?.
Esta semana se decidirá el nombre del despacho que hará la auditoría y se conocerá el costo de este trabajo que financiará la Cámara de Diputados.