México, DF.- La Procuraduría General de la República (PGR) incautó en el Distrito Federal un cargamento de 262 kilogramos de cocaína pura, procedente de Panamá, que fue enviada en cajas que supuestamente contenían ropa de niño y caballero.
A través de un comunicado, la dependencia detalló que la droga fue detectada en una empresa de mensajería, ubicada en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
La carga de cocaína venía en 12 cajas de ropa usada, enviadas por una empresa radicada en Panamá, que dio como destinatario un domicilio falso en el Distrito Federal; entre las prendas se localizaron 265 “tabiques”, que de acuerdo con los dictámenes periciales, dieron como positivo 262 kilogramos de hidroclorato de cocaína pura.
Sobre este decomiso, la PGR indicó que se logró a partir del intercambio de información de inteligencia compartida con la Aduana México del Servicio de Administración Tributaria.
Ahora la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), se encargará de las investigaciones sobre el origen y destino de este cargamento.
Extraditan a EU a implicado en narco
Un mexicano implicado en el contrabando de cientos de kilos de cocaína cada año a los estados de California y Alaska, entre otros, fue extraditado a Estados Unidos para someterlo a proceso por narcotráfico.
Francisco Pancho Avilés Pérez, de 61 años, fue entregado por las autoridades mexicanas al FBI, dijo en Los Ángeles la vocera de la corporación policial Laura Eimiller.
Avilés Pérez fue detenido por la Policía mexicana hace casi un año en su casa en Sinaloa después que la DEA descubrió su paradero, de acuerdo a la información divulgada el jueves.
El sospechoso, que estuvo recluido en una prisión en México, fue extraditado el miércoles. En 2002 apareció implicado en una acusación federal por asociación delictuosa para distribuir cocaína, entre otros cargos que en total conllevan la cadena perpetua.
Al momento de la acusación, Avilés Pérez ya estaba en México luego de ser deportado al cumplir diez años de cárcel en Estados Unidos por tráfico de heroína.
