Medicinas y víveres son trasladados por el Ejército de Nicaragua a las zonas afectadas por el huracán “Félix”, que dejó miles de viviendas destruidas y cientos de damnificados. (Fotografías de AP y EFE)
Baja el meteoro d intensidad hasta convertirse en un sistema de baja presión.
El número de muertos en las costas caribeñas de Nicaragua y Honduras aumentó a 100, luego que las autoridades hondureñas encontraron flotando los cuerpos de 25 indígenas misquitos que naufragaron en alta mar al huir de sus comunidades azotadas por el huracán Félix.
Otros 32 indígenas se encuentran desaparecidos, mientras que 52 fueron rescatados del océano, dijo el coronel Saúl Orlando Coca, de la Comisión Permanente de Contingencias de Honduras.
“No se trata de pescadores, son indígenas nicaragüenses que venían a Honduras en tres canoas en busca de comida y refugio después que el huracán Félix destruyó sus viviendas en una comunidad cercana a Puerto Cabezas”, agregó.
El meteoro, que ya bajó de intensidad hasta convertirse en un sistema de baja presión, ya sobre territorio hondureño, destruyó además cerca de 9 mil viviendas y dejó a casi 16 mil personas desplazadas distribuidas en 76 albergues en el litoral del Atlántico norte y 50 mil damnificados.
Desde la costa remota y pantanosa de la selva, Coca informó que oficiales estadounidenses y hondureños patrullan el océano y la costa en botes y helicópteros, mientras soldados recorrían las playas a pie. Los aldeanos locales buscaban a los desaparecidos.
El jefe de la Defensa Civil de Puerto Cabezas, Coronel Ramón Arnesto Soza, dijo que las cifras sobre muertos desaparecidos son preliminares y que podrían aumentar a medida que las brigadas de socorro lleguen a apartadas comunidades misquitas, donde es difícil llegar por obstáculos en los caminos y los ríos navegables.
Agregó que Martín Álvarez, capitán de un barco pesquero, les informó que recogió nueve cadáveres en descomposición del océano y los llevaba a tierra, pero el hecho aún no está confirmado.
Los que soportaron la tormenta en tierra carecían de agua potable. En una aldea aislada lo único que había para beber era leche de cocos caídos.
Unos 150 mil misquitos -descendientes de indígenas, colonos europeos y esclavos africanos- viven en las islas de los arrecifes y aldeas de la selva, principalmente en la costa de Honduras y Nicaragua.
Los escombros impidieron que por lo menos una misión de rescate desembarcara en Sandy Bay, donde el ojo del huracán “Félix” tocó tierra el día anterior con vientos catastróficos de 257 kph y una marejada proyectada de seis metros sobre el nivel normal de las mareas. Desde lejos, los marineros veían palmeras caídas y chozas de madera reducidas a astillas. También vieron a mujeres que lloraban en la orilla.
La escasez de alimentos y combustible continuaba ayer pese a que la ayuda estaba llegando a Puerto Cabezas, Nicaragua, la capital regional a la que el acceso es difícil, incluso con buen tiempo. El ministro hondureño de Defensa Arístides Mejía, envió barcos y un helicóptero militar para ayudar en los rescates.
El Comando Sur de las Fuerzas Armadas estadounidenses envió un buque anfibio a Nicaragua para ayudar a coordinar los esfuerzos de socorro. Venezuela también envió ayuda y 57 médicos y enfermeras de Cuba que ya estaba en la costa misquito se sumaron a las tareas de ayuda.
El jueves, “Félix” se había visto reducido a persistentes lluvias en el estado de Chiapas, pero los ríos crecidos y las inestables laderas de montañas impidieron que miles de personas regresaran a sus casas en Centroamérica. En Honduras, un muchacho de 15 años fue sepultado por lodo cuando trataba de reparar una tubería de agua en Tegucigalpa y un hombre de 34 años se ahogó en una zanja en El Progreso.
En tanto, un repentino aguacero de una hora provocó la tarde de ayer el desbordamiento de un río en Tegucigalpa matando a una vendedora de un mercado, que estaba embarazada y un niño está desaparecido tras ser arrastrados por la corriente, informaron las autoridades.
El obsoleto drenaje de la capital, ayudó a incrementar las inundaciones. La lluvia desprendió cables de electricidad dejando sin energía algunos sectores, árboles y rótulos cayeron sobre vehículos y las autoridades reactivaron el estado de emergencia.
Necesita Nicaragua 26 mdd para enfrentar daños
Nicaragua urge de 26 millones de dólares para enfrentar los daños ocasionados por el huracán Félix, que devastó el Caribe norte de ese país, informó ayer el Ministerio de Relaciones Exteriores.
“Al día de hoy se está requiriendo un aporte de 26 millones de dólares”, precisó el representante de la Organización de las Naciones Unidas en Managua, Alfredo Missair, de acuerdo a un comunicado de la Cancillería divulgado ayer.
Esa información fue brindada por el representante de la ONU tras un encuentro que mantuvo con autoridades nicaragüenses, en la que participaron delegados de países con misión diplomática en Managua.
El representante de la ONU manifestó que, ante las circunstancias dramáticas que está atravesando la zona del Caribe norte, es preciso que toda la comunidad cooperante aporte a esta causa humanitaria.
En la reunión, celebrada este miércoles, también participó Emilio Canda, encargado de negocios de la Unión Europea y vicepresidente de la mesa de cooperantes en Nicaragua.