Para evitar problemas, el Municipio no quiere dar continuidad a las obras pendientes hasta que no sean auditadas por la autoridad competente.
El Siglo de Durango
PEÑÓN BLANCO, DGO.- “Hay administraciones que tienen que empezar desde cero; sin embargo, en Peñón Blanco estamos iniciando más abajo todavía, comentó el alcalde, Alejandro Amaya, luego de mencionar que su antecesor se negó a firmar las actas del proceso de entrega-recepción.
Deudas cuantiosas al Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), parque vehicular destruido, una nómina alta y maquinaria descompuesta es lo que recibió la nueva administración de Peñón Blanco, además de la carga de conciliar con 27 ex empleados del Ayuntamiento, respecto de su finiquito.
De este último problema, se están buscando arreglos que ya se han logrado con unos cuantos; sin embargo, los convenios se siguen buscando.
Mientras tanto, en estos primeros días de gestión, el Cabildo busca la manera de ajustar la nómina de acuerdo con las necesidades reales, ya que se estaban manejando cantidades muy elevadas durante la administración de Silvano Venegas Antuna.
Hay un desequilibrio evidente en cuanto al presupuesto de las obras que se iniciaron o llevaron a cabo, el cual se refleja en una deuda elevada para con Banobras.
Además de esto, hay obras inconclusas y con gastos dudosos, por lo que el actual Gobierno no les “meterá mano”, hasta que Contraloría del Estado haga algo al respecto, pues aunque hay unas que requieren de seguimiento, es mejor dejarlas como están mientras “se toman cartas en el asunto”.
Por otra parte, Alejandro Amaya dijo que el parque vehicular que les entregaron se encuentra en muy mal estado, “en este momento nadie puede ir a la ciudad de Durango en un vehículo oficial, porque simplemente no llega”, mencionó.
Comentó también que una retroexcavadora, propiedad del Municipio, la recibieron en malas condiciones, la cual incluso tenía por lo menos cuatro meses que no se le hacía cambio de aceite, en tanto que una motoconformadora se encontraba quebrada.
Tales condiciones el Cabildo las ha tenido que tomar en cuenta para poder planear el trabajo que habrá de realizar durante estos tres próximos años, en los que se buscará resarcir las fallas de administraciones pasadas de acuerdo con la exigencia de la ciudadanía.
Desmantelamiento
Causa extrañeza y preocupación a Alejandro Amaya, presidente municipal de Peñón Blanco, el hecho de que desde hace unos días han estado sacando maquinaria del inmueble que por un tiempo ocupó una maquiladora.
Cuando inició operaciones la maquila, que posteriormente fracasó, el Municipio participó en la mezcla de recursos con alrededor de un millón 500 mil pesos, en tanto que para el pago de sueldos gasto más de 550 mil pesos.
Llama la atención del Alcalde que en los últimos días se ha estado sacando la maquinaria que se empleó en dicha fábrica, que quedó en las bodegas, que en un tiempo fueron el lugar de trabajo de la empresa, pero nadie ha informado o mostrado un documento de por qué lo hacen.
El mandatario consideró que si el Municipio participó económicamente en la empresa, tiene derecho a saber qué se hace con los implementos que de ella quedaron, en tanto que no se puede descartar la posibilidad de volver a intentar aprovechar dicho recurso para probar otra fuente de empleo.