Desde hace tres días los dos países padecen torrenciales aguaceros.
Las lluvias torrenciales que afectan desde hace tres días el centro y sur de la India, así como la sureña ciudad paquistaní de Karachi han causado la muerte de al menos 367 personas, confirmaron ayer fuentes oficiales.
Además de severas inundaciones, que en algunas zonas superaron más de un metro de altura, las lluvias provocaron deslizamientos de tierra, la destrucción de cientos de viviendas y la interrupción de los servicios de energía eléctrica y teléfono.
En Pakistán, las autoridades confirmaron ayer que el número de muertes por las precipitaciones aumentó a 228, luego del recuento de 185 cadáveres que se encontraban en diversas zonas del estado de Sindh, mientras que más de 200 resultaron heridas.
En Karachi, considerada la capital comercial del país paquistaní, la mayoría de las víctimas perdió la vida al desplomarse los tejados de sus viviendas, electrocutadas y por el deslizamiento de lodo, según informes de prensa.
El alcalde Mustafa Kamal, informó que en las últimas horas veintitrés personas fallecieron, entre ellas 18 que quedaron sepultadas bajo sus casas de barro, mientras que se había declarado estado de emergencia en los hospitales públicos por el sobrecupo de personas heridas.
El Departamento Meteorológico de Islamabad, capital paquistaní, informó que las precipitaciones pluviales forman parte de “lluvias pre-monzónicas generadas por un fuerte sistema fluvial que cada año afectan la región.
En tanto, en la vecina India, al menos 139 personas han perdido la vida a causa de las lluvias torrenciales que han asolado el centro y sur de país, principalmente en los estados de Andra y Kerala, donde fueron desplazadas cientos de familias enteras.
Unas doce mil personas quedaron prácticamente atrapadas por las severas inundaciones que provocaron el cierre de varios caminos en la ciudad de Kerala, además de los deslizamientos de tierra, mientras que más de un millar de familias perdió sus hogares.
Las lluvias también afectaron el estado de Maharastra, donde se reportó la muerte de 11 personas y en Bombay, la capital regional, el tráfico ferroviario y aéreo se ha visto seriamente dañado, según un reporte de la agencia india TPI.
El centro y sur de la India se encuentra en la primera fase de la época del monzón, que comienza en el mes de junio en el área meridional del país para ir avanzando hacia el norte y persiste hasta finales del mes de septiembre.