Una joven musulmana ha presentado una demanda por discriminación religiosa contra la dueña de una peluquería de Londres que no quiso contratarla si no aceptaba quitarse el velo islámico en el trabajo.
La dueña del local, Sarah Desrosiers, de 32 años, cuyo salón se especializa en cortes "funky urbano", explicó al vespertino Evening Standard que había rechazado a Bushra Noah, de 19 años, porque cualquier peluquera que contratase debería mostrar su propio peinado como forma de atraer a los clientes.
Noah ha presentado una demanda de indemnización por más de 15 mil libras (21 mil 600 euros) tras acusar a Desrosiers de haberla tratado con rudeza cuando la entrevistó y haberla rechazado para un trabajo que ella se sentía plenamente capaz de realizar sólo por llevar velo.
Desrosiers, que montó su propio negocio hace año y medio, se ha gastado ya más de mil libras ( mil 440 euros) en su defensa legal, afirma que si pierde el juicio, se verá obligada a cerrar.
"Yo vendo imagen - es muy importante - y espero de una peluquera que exhiba su peinado porque es la forma de atraer a los clientes.
Si alguien llevase una gorra de béisbol o un sombrero de cowboy le diría que se lo quitasen en el trabajo", explica la dueña, citada por el vespertino.