La V cumbre de la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA) sirvió para que sus miembros ventilaran denuncias en contra de organizaciones internacionales en una “declaración política condenatoria” el domingo.
Mientras que el presidente boliviano Evo Morales arremetió contra los mecanismos de arbitraje internacional, específicamente el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), Hugo Chávez hizo lo propio contra la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA por intentar una demanda contra el Estado venezolano por no renovar la concesión de la televisora RCTV.
Chávez criticó la “alharaca mundial” que ha generado el caso de la televisora y aseguró que sus opositores intentan lograr que el Parlamento Europeo se pronuncie en contra de Venezuela.
“Nosotros denunciamos... a la célebre Comisión Interamericana de Derechos Humanos, esa comisión que todavía no se ha pronunciado sobre el golpe de Estado en Venezuela... Ahora, esa CIDH está demandando a Venezuela... en la Corte Interamericana”, dijo durante el debate de la cumbre. “Ese es el colmo de los colmos”.
Recordó la amenaza que hizo luego del golpe de Estado, cuando aseguró que si se condenaba a Venezuela, el Gobierno se retiraría de la organización, “como Cuba, bueno, no pertenece a la OEA y no se han muerto los cubanos”.
“Hemos pedido el apoyo infinitas veces en esta batalla contra el imperio y sus lacayos y todos esos entes internacionales que son dominados por Estados Unidos, hemos logrado el apoyo de la mayoría de los gobiernos y los pueblos de América Latina”, afirmó.
“Que vengan por mí” retó, antes de reiterar que en el país se urde una conspiración en contra de su Gobierno.
Ante las denuncias de Evo Morales y Daniel Ortega en contra del Ciadi, el presidente venezolano propuso la creación de un mecanismo propio de arbitraje.
“En el futuro nosotros podemos crear nuestros organismos también de... arbitraje... si algunas transnacionales van a acusar a Cuba, o a Nicaragua o a Bolivia allá en Washington, nosotros ponemos nuestro arbitraje a lo mejor en Managua y venimos a acusar a esas que nos acusan y a lo mejor decidimos entonces bueno sancionarlas en nuestro territorio”, propuso Chávez.
“¿Son petroleras, verdad? Ellas en Venezuela tienen presencia. Avísame cuáles son, no me digas ahorita. Dime después cuáles son. Yo me llevo una listica para nosotros bueno, aquí tenemos manera de apretar tuercas también, ¿no?, si actuamos conjuntamente”, dijo Chávez a su homólogo boliviano.
“El ALBA debería asumir una posición de denuncia ante un conjunto de instituciones, de acciones permanentes, de ataques contra nuestros pueblos, contra nuestros gobiernos”, agregó.
El vicepresidente cubano Carlos Lage se sumó para denunciar también la liberación de Luis Posada Carriles, acusado de un atentado con bomba que derribó un avión de Cubana de Aviación.
Los presidentes aprobaron varias declaraciones, una política y otra en condena a la liberación de Posada, además de un Tratado y un Acuerdo energéticos.
La canciller de Ecuador, María Fernanda Espinoza, aprovechó para recordar que el Gobierno de Rafael Correa ya expulsó de su país al representante del Banco Mundial. “Como dijo el presidente Evo Morales, no hay que tener miedo”.
Fidel ya está al mando: Chávez
El jefe de Estado venezolano, Hugo Chávez, dijo ayer que Fidel Castro “está al mando”, al ser consultado sobre la hipótesis de que el líder cubano reasuma oficialmente la Presidencia de su país mañana primero de mayo.
Chávez aclaró que fue el presidente de Bolivia, Evo Morales, el que lanzó la idea de que será el primero de mayo cuando Castro retome oficialmente el poder.
“Yo creo que Evo y Fidel tienen un plan tan secreto que ni yo lo conozco, por eso no me atrevo a hacer comentarios. Pero lo que yo siento, más allá del empeño de Evo en que Fidel salga el primero de mayo, es que Fidel está el mando”, dijo Chávez. quien intercaló el tono jocoso con la seriedad.
El gobernante mencionó que ayer recibió una carta de Castro, de casi diez páginas, de corte “filosófico” en la que “habla mucho del Che”, y de aspectos relacionados con la marcha histórica de la revolución cubana, y del proyecto originario de Mao Tse Tung.
Chávez añadió que en la carta Castro le augura que China “será la gran superpotencia del siglo XXI” y concluyó que lo que el líder cubano le quiere advertir es que “el socialismo del siglo XXI debe acoplarse a las circunstancias del siglo XXI”.