Desde temprano la gente comenzó a participar en la verbena que se realizó en la ciudad de Vicente Guerrero, en honor del santo patrón.
VICENTE GUERRERO, DGO.- Muestras de fe y devoción entregaron los fieles de la región al “abogado del amor”, San Antonio de Padua, mientras que en las calles, los antojitos y vendimia completaban el día de fiesta que se vivió en “Muleros”.
Con una misa de gallo a las 23:00 horas del 12 de junio, iniciaron los festejos en torno al santo patrón de la ciudad de Vicente Guerrero, mientras que ayer durante todo el día hubo celebraciones religiosas, danzas, kermés y por la noche la tradicional quema de pólvora.
Simón Pedro Gurrola Ibarra, párroco de la Iglesia de San Antonio de Padua, manifestó que alrededor de 800 personas participaron en las actividades religiosas que se llevaron a cabo ayer, mayor al año pasado; aumenta la veneración a uno de los santos más populares de México.
Por ejemplo, durante la misa mayor que se realizó a las 12:00 horas, la iglesia estaba llena de fieles a tal grado que algunos estaban de pie y otros permanecían a las puertas del tempo porque ya no cabían.
A las 18:00 horas se efectuó la misa por los enfermos, a las 19:00 horas la misa de matrimonios, a las 20:00 horas para rogar por los emigrantes y ya por la noche, pasadas las 22:30 horas, todos se congregaron para admirar la quema de pólvora.
Durante todo el día, más gente de la que acudió a la iglesia vendía, compraba, comía y paseaba por el primer cuadro de la ciudad donde, como cada año, se colocan diversos puestos de alimentos y todo tipo de recuerdos.
Al respecto, Gurrola Ibarra comentó que no se debe olvidar que lo que se está recordando en estas fechas es a San Antonio y su forma de vivir en rectitud y devoción para con el Creador, antes que tomarlo como un día de fiesta y hasta borrachera, por lo que hizo un llamado de responsabilidad a los padres de familia respecto de la educación de los hijos.
La historia muestra cómo este personaje siempre tuvo el interés de servir de lleno a Dios, hasta convertirse en un santo que ha cobrado popularidad y el apelativo del “abogado del amor”, debido a las diversas historias que de él se cuentan.
Lo cierto es que a este santo las mujeres solteras le pagan promesas por los milagros recibidos, específicamente por ayudarles a conseguir pareja, pues en ocasiones le quitan al niño y lo encierran en el clóset hasta no obtener respuesta o en la mayoría de las veces lo ponen de cabeza y le rezan, dentro de una añeja costumbre.
Referencias
Simón Pedro Gurrola Ibarra, párroco de la Iglesia de San Antonio de Padua, platicó dos historias por las cuales se conoce al patrón de Vicente Guerrero como “abogado del amor”.
Se dice que el religioso originario de Lisboa, Portugal, al ver a los enamorados juntos, cortaba una flor y se las entregaba, no sin antes darles un mensaje sobre el amor verdadero y la importancia de la pureza en la relación de la pareja.
De esta manera, algunos enamorados se acercaban a él sabedores de que siempre tenía un consejo qué dar sobre el tema del corazón.
Por otra parte, se cuenta que el religioso era de un hombre no bien parecido, pero muy piadoso; sin embargo, los estatutos de aquella época dictaban que para que un hombre se ordenara como sacerdote debería ser agraciado físicamente.
San Antonio no cumplía dicho requisito, por lo que sus superiores hablaron con él, admitieron su devoción y entrega, pero le dieron a conocer cuál era el impedimento para que se convirtiera en sacerdote, motivo que lo entristeció pero no apagó su interés por servir a Dios.
El hombre se fue a dormir y por la noche un milagro transformó su rostro, haciendo de él un hombre bien parecido.
Así, se le empezó a relacionar con la belleza y el amor a este santo que tiene seguidores en todo el mundo, y en Vicente Guerrero no es la excepción.
