Los precios de los granos se han incrementado en forma significativa en los últimos meses, sin embargo, los analistas consideran que esto no desestabilizará la inflación.
México, DF.- Aunque puede haber presiones en los precios en los próximos meses, no se prevé un escenario pesimista en la inflación para el cierre de este año, confió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
El organismo señaló que la inflación anual en septiembre pasado, de 3.79 por ciento, se ubicó por debajo de la meta fijada para este año -3.0 por ciento, más/menos un punto porcentual-, dado el menor aumento en los precios de algunos productos agropecuarios.
"Se reafirma, pues, la confianza en que, a pesar de que en los próximos meses podrían advertirse presiones en los precios, en este renglón no se prevé un escenario pesimista para al final del año", anticipó en su Análisis Económico Ejecutivo.
Explicó que el acuerdo de incremento de cuatro por ciento directo al salario que llegaron autoridades y sindicato del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estará en línea con el comportamiento de la inflación.
Además, los trabajadores sindicalizados lograron otro aumento por concepto de prestaciones y bono de productividad -2.0 por ciento- para responder a las demandas crecientes de cirugía y servicios de salud que tiene la población.
"Así, este acuerdo salarial nuevamente resuelve el problema inmediato; sin embargo no aporta nada para la viabilidad de largo plazo de la institución", precisó el organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Afirmó que las opiniones pesimistas de algunos analistas se vieron frustradas ya que la economía de Estados Unidos sigue dando señales de avance, con un alza mayor a la prevista en ventas al menudeo en septiembre pasado, por la evolución favorable del consumo, el ingreso y la fortaleza del empleo.
Por otro lado, indicó que las preocupaciones en torno a la estabilidad de precios perduran luego del incremento en la inflación al productor en septiembre pasado.
El CEESP resaltó también el comportamiento favorable del saldo de la balanza de bienes y servicios, el cual mostró una disminución en su déficit y una reducción importante de las importaciones, debido en parte a la debilidad del dólar y fortalecimiento del euro en los últimos meses.
Agregó que sta coyuntura de mayor impulso al sector exportador norteamericano, vía tipo de cambio, puede no ser una mala noticia para México, dada la correlación existente entre ese sector y el sector manufacturero nacional, lo cual eventualmente podría traducirse en un beneficio indirecto.
