La diversificación a terceros mercados de los productos mexicanos y un dinamismo del mercado interno protegen al país de ajustes económicos drásticos como en 2001. (Archivo)
México está mejor posicionado para enfrentar un entorno adverso internacional y queda descartado que pueda repetirse un ajuste “dramático” como el que ocurrió en 2001 con la recesión de Estados Unidos, afirmó Banamex-Citigroup.
Resaltó que el país ha desarrollado “una serie de amortiguadores” a choques externos como la diversificación a terceros mercados, un dinamismo del mercado interno y la posibilidad de ampliar la inversión a través de proyectos de infraestructura.
Además de que son factibles avances adicionales en la agenda económica estructural, como las reformas energética y laboral. Y es que, resaltó, el ajuste inmobiliario, el deterioro en las condiciones crediticias y el precio del petróleo han ensombrecido el panorama en Estados Unidos y a nivel global.
En su estudio “Examen de la Situación Económica de México”, el grupo financiero alertó que las condiciones que pueden detonar círculos de deterioro en Estados Unidos están presentes: esto es, la corrección inmobiliaria no ha sido suficiente; dudas sobre el costo y la capitalización en bancos e intermediarios limitan y encarecen el crédito y las familias y empresas enfrentan costos crecientes en energía. Resaltó que a pesar de la caída de los precios de las casas y la retracción de la inversión residencial, el inventario se mantiene elevado, por lo que los precios necesitan bajar más y por un tiempo prolongado.
“La inversión y otros sectores pueden verse afectados tanto por el deterioro de las perspectivas como por la astringencia crediticia.
Tenemos, pues, un cambio importante en el escenario”, apuntó Banamex-Citigroup.
En este contexto, subrayó que México ha tenido un buen comportamiento a nivel financiero ante esta incertidumbre y el contagio no ha sido tan adverso.
Y es que, dijo, los riesgos para un buen desempeño de la economía americana en 2008 han aumentado; están relacionados con el ajuste inmobiliario, sus secuelas crediticias, y con los elevados precios del petróleo. Al respecto, el grupo financiero resaltó que en la actualidad, el mayor riesgo en Estados Unidos es de un contagio financiero que afecte sobre todo al consumo; no el de una recesión industrial como la de 2001. Destacó que la economía estadounidense, fuera del sector inmobiliario es sólida, mantiene elevada la productividad y no hay desbalances sectoriales, además de que prevalece una posición financiera y patrimonial robusta en familias y empresas.
Crece economía de EU
La economía de Estados Unidos creció un 4.9 por ciento en el tercer trimestre, el mejor ritmo en cuatro años, según informó el Gobierno, que mantuvo sin cambios la previsión hecha pública hace un mes.
Pese a esos datos positivos, los expertos prevén que la primera economía mundial sufra una brusca desaceleración durante el actual trimestre y en el arranque de 2008, un periodo en el que según los analistas existe peligro de recesión.
El ex presidente de la Reserva Federal (Fed) Alan Greenspan alertó la semana pasada de que las probabilidades de una recesión en Estados Unidos están “aumentando claramente” y señaló que el país se aproxima al “estancamiento económico”.
Las previsiones apuntan que EU crecerá a un ritmo del 1.5 por ciento o menos durante los tres últimos meses de este año.
Para evitar que la economía entre en recesión, la Fed ha recortado los tipos de interés en un cuarto de punto porcentual en tres ocasiones este año, hasta dejarlos en el 4.25 por ciento.
Los recientes problemas económicos surgieron a raíz de la morosidad récord en el sector de hipotecas de alto riesgo, que ha provocado, a su vez, un endurecimiento del acceso al crédito.
Esa crisis de liquidez hace que a los consumidores les resulte más difícil conseguir dinero para comprar una vivienda, lo que refuerza, a su vez, los problemas del sector inmobiliario.
Esos problemas se han traducido en pérdidas multimillonarias para los bancos y desencadenado fuertes oscilaciones en los últimos meses en la Bolsa de Nueva York y en los mercados mundiales de capitales.
