GUADALUPE VICTORIA, DGO.- Con renovados bríos y esperanzas en repetir un buen año agrícola, los campesinos avanzan en la preparación de tierras para el ciclo primavera-verano 2007, donde el principal cultivo seguirá siendo el frijol, aún cuando su comercialización sigue siendo el “cuello de botella” del sector primario.
También ampliarán la superficie del maíz, debido a los buenos resultados logrados el ciclo pasado cuando empresas laguneras compraron toda la producción de algunos ejidos como Ignacio Allende.
Alberto Cardona Téllez, comisariado del ejido Guadalupe Victoria, señaló que los campesinos tienen el 80 por ciento de sus tierras barbechadas, esperan la oportuna liberación de recursos y el apoyo de la semilla certificada.
El año pasado les autorizaron 35 toneladas de semilla certificada de la variedad pinto Santillo y solamente distribuyeron 28 en el ejido Guadalupe Victoria, ya que muchos campesinos no acudieron al llamado, seguramente cansados de promesas incumplidas.
Comentó que el ciclo pasado entregaron por campesino 150 kilogramos para cinco hectáreas, esta vez esperan el mismo procedimiento, pues las autoridades del sector como la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación no han rendido un informe al respecto.
De lo que si hay certeza, comenta Cardona Téllez, es la siembra de frijol en una superficie del 70 al 80 por ciento, es el cultivo de las preferencias porque los campesinos tienen la infraestructura como de ningún otro grano en la región de los Llanos, a pesar de las adversidades con las que se enfrentan cada año.
Subrayó que hay campesinos que siguen esperando el pago del frijol que entregaron a las acopiadoras autorizadas en diciembre y enero, con lo cual hace notar Cardona Téllez las deficiencias en la comercialización.
Eso hace que los campesinos vendan a los “coyotes” a precios bajos sus cosechas, pues reciben el dinero de manera inmediata y en las acopiadoras tienen que esperar hasta tres meses o más su liquidación.
Por el momento los campesinos desconocen la planeación de cultivos de parte de la Sagarpa y la liberación de recursos para el próximo ciclo agrícola.
