El ex presidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000) defendió hoy la política antisubversiva que aplicó su gobierno en la década pasada y negó haber diseñado un plan para exterminar a los integrantes de grupos armados ilegales.
Al comparecer este miércoles ante un tribunal en el marco del proceso en su contra por presuntas violaciones a los derechos humanos, Fujimori aclaró que el diseño de la estrategia contra los insurrectos correspondió a las Fuerzas Armadas.
'El presidente de la República, de acuerdo con la Constitución, no elabora planes. Lo que hice fue labores de seguimiento a la lucha antisubversiva. El presidente tiene mando pero no comandos', aseveró Fujimori.
Explicó que durante su gobierno lo que buscó fue la adhesión de la ciudadanía hacia la lucha que iniciaban los militares, quienes 'liquidaron a Sendero (Luminoso), pero no con balas, sino con las armas de otro tipo, como construyendo escuelas y carreteras'.
Según Fujimori, existía una disposición dentro de los institutos armados para que cuando una persona fuera capturada por su supuesta militancia en Sendero Luminoso o el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), de inmediato los militares informaran a su comando.
En aquella época, recordó el ex jefe de Estado, era masivo el apoyo de estudiantes universitarios hacia Sendero Luminoso, organización acusada de haber perpetrado el 43 por ciento de los 69 mil crímenes registrados en el país andino entre los años 80 y 90.
Al explicar la presencia de su ex asesor de inteligencia Vladimiro Montesinos en el entorno presidencial, Fujimori dijo que éste fue el nexo entre las Fuerzas Armadas y el Ejecutivo.
En ese contexto, el ex mandatario peruano añadió que se creó la imagen de que Montesinos tenía influencia en diversas áreas de poder, cuando en realidad era sólo asesor de la Alta Dirección del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN).
Recordó que el ex jefe del gabinete ministerial Juan Carlos Hurtado Miller objetó la designación de Montesinos como director del SIN, aunque aceptó que fuera el 'coordinador de coordinadores' de todos los servicios secretos de las instituciones armadas y policiales.
Fujimori dijo que su ex asesor, que también se encuentra detenido acusado de múltiples delitos, le ayudó a superar la resistencia que había en su contra cuando asumió el mandato el 28 de julio de 1990 y conjuró varias crisis para su gobierno.
Al ex gobernante se le acusa de haber ordenado dos operativos antisubversivos en los que murió un total de 25 personas a manos de agentes del grupo paramilitar Colina, que recibía financiamiento del Ejército peruano.