México, DF.- En el caso que derivó en la inhabilitación por diez años del ex director de Pemex, Raúl Muñoz Leos, existen más responsables por la complicidad entre las autoridades de la paraestatal y la elite sindical.
Así lo consideró el diputado federal por el PRD, Alejandro Sánchez Camacho, a la sanción que impuso la secretaría de la Función Pública a cargo de Germán Martínez, al ex funcionario en la Administración del presidente Vicente Fox.
“Si bien dichos funcionarios resultan culpables, hay otros responsables por la complicidad existente entre las autoridades de la paraestatal y la élite sindical, hecho que viene a recordar lo acontecido en el caso del pemexgate.
“El quebranto a la entidad por mil 724 millones de pesos tiene aún más matices, pues a pesar de que se dice que el desvío del dinero fue sin autorización del Consejo de Administración de la paraestatal, el silencio de los seis representantes del Gobierno designados por el ex presidente Vicente Fox, entre ellos, de las Secretarías de Hacienda y Crédito Público y de Energía y los cinco representantes del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, da muestras que en estos hechos eran de su más amplio conocimiento”, afirmó el diputado perredista.
Sánchez Camacho acusó que de esta manera los gobiernos panistas han dado continuidad a la práctica “de otorgar canonjías a la dirección sindical, a cambio de mantener el control sobre los trabajadores petroleros”.
Consideró que es de suma importancia “mantenernos alertas dado que el Gobierno panista sigue con su campaña para mostrar a Pemex como una empresa inviable y con ello avanzar en sus propósitos privatizadores de un recurso considerado, constitucionalmente, como reservado para la nación”.
