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MÉXICO, DF.- La presentadora mexicana Claudia Lizaldi se defendió de las acusaciones sobre el accidente que tuvo la madrugada del domingo al asegurar que no ignoró la luz roja del semáforo, que no conducía en estado de ebriedad, ni iba a exceso de velocidad.
?Nada más estoy un poco golpeada y con el ojo morado; la verdad es que no me acuerdo, iba cruzando Reforma y luego desperté en el hospital?, declaró la tarde del lunes a los medios de comunicación tras permanecer internada en la Cruz Roja de Polanco.
Negó haber declarado ante las autoridades que ella tuvo la culpa al pasarse el alto y provocar el choque en el que David Atach Mosteryk, Lina Algraili Saak y Ramón Farca resultaron lesionados.
?No atestigüé ninguna culpa, las cosas deben hablarse con la verdad; yo estaba a una cuadra de llegar a mi casa, estaba tranquila, tenía que tomar mis maletas y viajar a Puerto Vallarta?, explicó.
Acompañada de sus padres, Lizaldi aseguró que no se encontraba bajo los influjos del alcohol y que los rumores de la prensa son falsos.
?Son sólo versiones y cada quien maneja la que le conviene, la que sea propia; lo que yo les puedo decir es que iba a mi casa por mi maleta y que estaba bien?, añadió.
En ese sentido, su madre, Ivonne Mijares, manifestó que ?la otra persona con la que chocó (Mosteryk) ya aceptó su responsabilidad y no tenemos mayor problema?.
Lizaldi aclaró también que no se encuentra en calidad de detenida y que los problemas jurídicos, como daños materiales y lesionados, se resolverán.
De acuerdo con los médicos, los golpes que recibió la presentadora no tendrán algún tipo de consecuencias, ya que se trató de un traumatismo cráneo encefálico; ?le agradezco a Dios que estoy bien, no tengo fracturas, sólo tengo quemada la muñeca?, concluyó.
