Fotos: Sitio Oficial
La pasión del diseñador Nick Crosbie por los objetos inflables lo ha llevado a desarrollar toda una gama de muebles y otras piezas famosas en todo el mundo que además de poseer esta característica se distinguen por un original diseño.
Por medio de su firma, apropiadamente llamada Ínflate, este británico da forma a sillas, cojines y lámparas únicas.
Inspirado en la cultura pop de los años 50, Crosbie ha llegado incluso a crear una oficina inflable de 20 metros cuadrados.
Para crear sus piezas utiliza la técnica tradicional: láminas de plástico selladas que se llenan de aire a través de una pequeña válvula, muy común en la producción de balsas, llantas y globos.
Todos sus objetos están hechos con base en una delgada película de PVC, y a pesar de eso, el usuario puede sentarse, acostarse y brincar en ellas sin temor alguno. Se trata de piezas de gran resistencia, comodidad y buen gusto. "Somos especialistas en procesos de fabricación antiguos y poco explorados como es el caso de los objetos inflables.
"Además de los productos que desarrollamos, nos gusta sorprender a nuestros clientes con estrategias ingeniosas, desde con invitaciones originales hasta con arquitectura portátil", escribe Crosbie en las páginas del libro Designing the 21st Century de la editorial Taschen, en donde es considerado entre los 100 mejores diseñadores del mundo.
Según cuenta Crosbie, Ínflate nació como un proyecto de recién graduados que llevaban sus prototipos a las empresas para intentar entusiasmarlas con la idea de su producción masiva. "Al principio no nos fue muy bien; los fabricantes no querían saber nada de objetos inflables. Decían que estaban demasiado instalados en el gusto público como juguetes o productos baratos de poca duración." Tras algunos rechazos, continúa Nick Crosbie, "decidí comprar con mis ahorros la primera máquina selladora de PVC, un tipo de película plástica más resistente a la común. Así nació la firma Ínflate, como una microempresa. De esta manera logré producir en serie y vender mis primeros objetos: fruteros, marcos de fotos, tapas para frascos u originales postales inflables", dijo Crosbie, en entrevista para un medio chileno.
Entre sus piezas más famosas está la llamada Tumbona, una singular silla hecha de cojines de plástico rellenos de aire en color blanco, adaptados a una base de tubos de acero cromado. Otro mueble a destacar también es Memo, un singular puff en el que el usuario se puede recostar cómodamente.
Pero de entre todos, sobresale la Lámpara de escritorio, una de las favoritas de su creador, que además de útil, es un especial detalle decorativo.
Está fabricada en diferentes tonalidades como azul, verde o amarillo; su estructura parece un cojín, el cual cuenta con un orificio del que emerge el haz de luz. Es ideal para la lectura.
Su historia
Nick Crosbie se recibió de diseñador industrial en la Royal Academy de Londres, luego de haber abandonado la carrera de Arquitectura. Se volvió exitoso a finales de la década de los 90, cuando en Europa los objetos inflables volvían a ponerse de moda.
La reconocida firma sueca Ikea, que lidera desde 1990 las ventas de objetos de diseño a escala masiva, inauguró IkeAir, sólo dedicado a muebles y objetos inflables.
Al mismo tiempo, en Berlín se inauguraba BlowUp, una muestra que reunió artistas y diseñadores de vanguardia en materia de inflables procedentes de todo el mundo. Allí estuvo Ínflate y por primera vez, expuso sus estructuras "portátiles" como la oficina inflable.
