Amy Winehouse/ Back to Black
Si quieres escuchar un disco que goces de principio a fin existe uno llamado Back to Black, plasmado de neo soul y rhythm and blues contemporáneo que sin embargo no es pesado como Norah Jones ni fantasioso como Joss Stone.
Es sencillo, de sonido crudo pero digerible a la vez, con letras en primera persona que hablan de relaciones enfermizas, alcoholismo, depresión, marihuana, infidelidad, relaciones enfermizas ¿ya lo mencione?, en sí, todas esas linduras que debe cargar un buen compositor soul para crear su música y letras.
Varios ya habrán adivinado que me refiero a Amy Winehouse, compositora inglesa que acaba de cumplir 24 años, trigueña, delgada, de aspecto rudo y sensual, con los brazos llenos de tatuajes, contando con los aspectos físicos y de carácter que invitan hablar de ella no solamente a los críticos del rock, sino a la sensacionalista prensa británica, porque aunque su música, y su disco Fade to Black, la han convertido en la intérprete más halagada de los últimos 12 meses, su personalidad ha hecho de su vida privada ser la intérprete más perseguida por el amarillismo británico.
Only in the UK... Winehouse lanzó en Octubre del año pasado al mercado un Long Play de 12 canciones que compuso prácticamente a los 22 años, lo tituló Back to Black como un reflejo del estado emocional de la compositora, teniendo como hilo conductor de prácticamente casi todos los temas, el afecto a un hombre, que a juzgar por las letras éste no la quiere, pero bien que la utiliza, y ella, pues también que se deja querer a pesar del sufrimiento que esto le traerá.
Aunque a primera vista pareciera ser un disco femenino obviamente no lo es, el feeling de la música no toma género, al contrario, es universal, y las letras igual se aplican a una mujer que a un hombre, dependiendo del escucha.
Hoy sabemos que el disco fue escrito en dedicación al entonces ex novio de Amy Winehouse, un tal Blake Fielder-Civil que ahora es su esposo... lo que es la vida.
Hasta ahorita se escuchan los sencillos de Rehab y You Know I’m no good en nuestro continente, en donde parece sorprender que esta damita europea en sus letras hable tan desfachatadamente sobre su adicción al alcohol y el hecho de que le vale un soberano cacahuate la rehabilitación.
Bueno, si por algo Winehouse no se caracteriza es por ser políticamente correcta, si no escuchen Adiccted. Back to Black es un disco musicalmente poderoso y contrario a su temática es irónicamente esperanzador, aunque sólo sea musicalmente, porque a más de uno le hace pensar que todavía existen jóvenes capaces de crear un disco honesto y fuerte, lejano del comodísimo musical y de las poses de las figuras actuales del rock y del pop.
Por cierto, la pieza que nombre al álbum, Back to Black, es una auténtica joya que nos recuerda lo lamentable que es querer a la persona equivocada. Cover recomendado de la semana: Hurt a cargo del maestro Johnny Cash, su último sencillo cortesía de Trent Reznor Mr. Nine Inch Nails.
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